EL PP pide la dimisión de la concejal de Asuntos Taurinos por "grave negligencia"
lunes 18 de mayo de 2009, 11:17h
El Partido Popular ha exigido este lunes la dimisión de la concejal de Asuntos Taurinos de Aranjuez, Cristina Moreno ( PSOE), tras anunciar el pasado sábado que este municipio no tendrá toros en sus próximas fiestas patronales.
Desde el Ejecutivo insisten en que el Ayuntamiento de Aranjuez no tiene que hacer frente a los casi 300.000 euros de deuda heredada por el anterior empresario taurino, Romero Leal, mientras que desde la Comisión Nacional Taurina aseguran que es el consistorio ribereño el que debe afrontar el pago como "responsable subsidiario.
El conflicto entre Ayuntamiento y la Comisión Nacional Taurina ha desembocado en una negativa de los profesionales del ámbito taurino a torear en la bicentenaria plaza de toros ribereña. Un "chantaje" al que se han visto sometidos unos 40 municipios, tal y como explicó el alcalde de Aranjuez, Jesús Dionisio Ballesteros, por lo que llevarán este asunto a la Federación Española de Municipios. El regidor ribereño subrayó además que la acción del Gobierno fue refrendada por el Consejo Taurino de Aranjuez en el que se encuentran representados todos los partidos políticos, asociaciones y medios de comunicación.
Por su parte, la portavoz popular, María José Martinez, afirmó que el alcalde "manipula" al interpretar la firma unánime de los miembros de dicho Consejo a favor de acciones legales contra la empresa de Romero Leal y negar la responsabilidad del pago de la deuda al Ayuntamiento, con un apoyo a su gestión en esta crisis. Asuntos, según señaló, "radicalmente distintos". De hecho, la portavoz popular recordó que ya advirtió en 2006 que no se había tenido en cuenta la solvencia de las empresas aspirantes a gestionar los espectáculos taurinos, y que en 2008 presentaron una propuesta al pleno municipal sobre el incumplimiento del contrato por parte del empresario Romero Leal, que el alcalde pasó a ruego para evitar su debate.
Señaló, además, que el pasado mes de marzo desde el grupo popular se pidió la resolución del contrato ante el riesgo de que no hubiese corridas de toros en las fiestas patronales de mayo, y que en aquel momento el Partido Socialista acusó al PP de "practicar la política del miedo".