El gobierno de Ada Colau expuso la abdicación del rey Juan Carlos en su hijo como razón de peso para retirar el busto que presidía el salón de plenos del ayuntamiento, contraviniendo el artículo 85.2 del Real Decreto 2568/1986 que dice expresamente: "En lugar preferente del salón de sesiones estará colocada la efigie de S. M. El Rey".
Sin embargo, a día de hoy aún no se ha sustituido por una efigie del rey actual Felipe VI. De hecho, el ejecutivo de la ciudad condal apura los tiempos para aprobar cuanto antes una modificación del reglamento interno para determinar la simbología del Saló de la Reina Regent. Colau, apoyada en ERC y la CUP, pretende ornamentar la estancia destacando la “capitalidad de Barcelona” y “catalanidad”, según el nuevo articulado del Reglamento Orgánico Municipal (ROM) publicado por El Mundo.
Navarra rompe con los Reyes por email
Por su parte, la presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, ha remitido esta mañana un e-mail al Palacio de la Zarzuela para comunicar que su Ejecutivo ha decidido excluir a la Casa Real de la entrega del Premio Príncipe de Viana. El citado correo iba dirigido al jefe de la Casa Real y en él se adelantaba una copia de la carta física que se recibirá en Zarzuela en los próximos días.
La noticia la ha hecho pública este miércoles la consejera de Cultura, Deporte y Juventud del Gobierno foral, Ana Herrera, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Ejecutivo de Navarra, en la que se ha aprobado un decreto foral por el que se establece que la Casa Real no participará en la entrega del citado Premio de la Cultura 2016 como venía haciendo hasta ahora.
La consejera ha explicado que la decisión de que los Reyes no entreguen el premio viene recogida en el acuerdo programático del cuatripartito, que "dice expresamente que se desvinculará el premio de la monarquía española y se revisará el objeto y otras cuestiones derivadas del premio". Algo que no ha gustado nada a los populares que han denunciado que "el cuatripartito pretende ahora cargarse unos premios institucionalizados desde 1990 y que se entregaban en Leyre como homenaje a los Reyes de Navarra". "Desde el origen de estos premios se ha invitado a la Casa Real porque el Príncipe de Viana era el heredero de la Corona, pero parece que a este Gobierno le sale sarpullido con todo lo que tenga que ver con el país del que todos formamos parte", añadieron en una pregunta parlamentaria a la presidenta de Navarra.
Este premio, instituido en 1990, tiene como fin reconocer la labor llevada a cabo por personas o instituciones relevantes en cualquiera de los ámbitos de la cultura.
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