Las formaciones de derecha de Navarra aplicarán mal la lección que la izquierda lleva siguiendo en los últimos años, y acudirán muy divididas el 23-J.
En las elecciones generales habrá en total 3 papeletas de partidos de esa ideología de derecha y centro-derecha para los votantes: UPN, PP y Vox.
En 2019 se consiguieron poner de acuerdo UPN, PP y Ciudadanos para no desperdiciar votos y perder escaños desde esa única circunscripción que es el territorio navarro y crearon la coalición 'Navarra Suma'.
Con ella fueron a las urnas con la misma papeleta en las elecciones generales de España de abril de 2019 y la repetición de noviembre, así como en las elecciones autonómicas y municipales de mayo del mismo año.
Ruptura entre UPN y PP
Pero tras los enfrentamientos derivados de la votación de la reforma laboral, UPN y PP no sólo se han distanciado sino que en sus cruces de declaraciones atisba incluso algo de enemistad.
La historia conocida fue que UPN negoció con el Gobierno de coalición apoyar la reforma laboral de 2022 con sus 2 diputados propios, Sergio Sayas y Carlos Adanero.
Sin embargo, éstos, por su cuenta, contradijeron la imposición del partido y se negaron a apoyar la norma, alinéandose con la postura del PP, contraria a la reforma.
Tras no respetar la disciplina de voto, UPN les apartó y suspendió temporalmente, provocando que Sayas y Adanero se acercaran al PP, aunque oficialmente no entraron a formar parte del partido ni de su grupo parlamentario.
Todo ello provocó un choque entre los 2 partidos, que ha generado en que desde entonces van por caminos separados tanto en políticas nacionales como locales.
Por separado
Si bien es cierto que hubo un atisbo de acuerdo a última hora para ir en coalición, como ha ocurrido con Sumar y Podemos, plazo que vencía la anterior medianoche, el presidente de UPN, Javier Esparza, se negó a que el PP ocupara el número 2 en la lista navarra, como pedían en Génova. UPN es un partido hegemónico de la derecha en la región foral y se niegan a perder una plaza en el Congreso.
Finalmente tanto UPN como PP han decidido concurrir en solitario, lo que perjudicará a sus intereses. Además, hay que sumar la candidatura de Vox, que nunca ha ido en coalición con otros partidos desde que entró con fuerza en política nacional.
Hay que recordar que en las últimas elecciones autonómicas, las de mayo, UPN ganó en las urnas con el 27,92% de los votos, mientras que el PP obtuvo el 7,19%. Ahora también lo haría en las generales, previsiblemente, perjudicara el reparto de escaños para la derecha. Vox se quedó con el 4,28%, pero se le otorgaron 2 escaños.
Navarra aporta sólo 5 escaños al Congreso, por lo que UPN se llevaría seguramente 2, y los otros 3 restantes escaños se repartirán, teóricamente, entre la izquierda abertzale, la izquierda no nacionalista y el PSOE.
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