Bruselas ha seguido la idea de España y la Comisión Europea propuso ayer instaurar un impuesto a los beneficios extraordinarios de las empresas energéticas para recaudar 140.000 millones de euros.
Una medida que el Ejecutivo español anunció en julio y que esta misma semana ha superado su primer trámite en el Congreso, aunque con el voto en contra del principal partido de la oposición, El Partido Popular.
Sin embargo, los populares europeos sí apoyan la medida anticipada por Ursula von der Leyen para gravar a las energéticas. Feijóo se ha justificado señalando que la tasa europea habla de gravar los beneficios mientras que la española lo hará con la facturación. Una diferencia que ha supuesto votar 'no' por parte de los populares, aunque ha abierto la puerta a apoyarla si el Ejecutivo cambia ese aspecto y lo hace como propone Europa.
Montero defiende la propuesta española
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha hablado en 'Antena 3' al respecto y ha asegurado que el Ejecutivo español "ajustará" el impuesto a las empresas energéticas a la "figura" que se adopte finalmente en Europa una vez se haya consensuado.
Ha enfatizado que nunca ha habido ninguna "controversia" entre España y Europa, sino que en este sentido, el Ejecutivo español es el que ha llevado "la iniciativa", pues ha recordado que el plan español es anterior al comunicado ayer por la Comisión. El Gobierno lanzó la propuesta para gravar a energéticas y entidades financieras en julio, ha remarcado.
Ha afeado al líder popular que ya antes de conocerse la propuesta del gravámen a energéticas y a la banca se había posicionado en contra, pero que en cuanto en Europa han abogado por la misma medida ha cambiado de posición de forma "tramposa".
Si (
No(
