Las cosas ya estaban muy tensas entre las 2 alas del gobierno de coalición, la socialista y la morada, por la reforma de la ley del 'sólo sí es sí'. Pero si faltaba una llama para que prendiera más la mecha, esto ha llegado con las palabras de la ministra de Justicia, Pilar Llop, en una entrevista en la 'SER'.
La ministra socialista quiso justificar la reforma que ha impulsado el PSOE de la ley que impulsó Unidas Podemos desde el Gobierno, poniendo en duda ahora algunos de su fundamentos, así como la asignación de penas. Pero pronto pasó al ataque y criticó, sin mencionarlo, a Unidas Podemos, mostrando su contrariedad con los "mensajes confusos". Es como Llop se refería a las críticas de los morados por esta reforma exprés que quiere realizar el PSOE en el Congreso.
Y lo peor no fue eso, sino que la titular de Justicia, cuando quiso argumentar que la reforma no sería un problema para el principio básico del consentimiento de la víctima para poder denunciar agresiones sexuales, quiso poner un ejemplo gráfico y le salió muy mal: "Es sencillo probar que hubo violencia, con una herida ya se puede".
Minutos después de esa entrevista y la referencia a la "herida" saltaron todos los resortes de Unidas Podemos, que criticaron con dureza a Llop, sin importar el clima de tensión que iba a tener la reunión del Consejo de Ministros en los siguientes minutos. Y es que tanto políticos, colectivos feministas y expertos coinciden en que no siempre las agresiones sexuales provocan heridas o marcas en la víctima y son igualmente graves.
Reacciones 'moradas'
Si bien Irene Montero, ministra de Igualdad y máxima valedora de la ley del 'sólo sí es sí', impulsada por su ministerio, ha mantenido por ahora un prudente silencio, sí que otros de sus compañeros se han pronunciado al respecto.
El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, cargó contra la ministra por decir que la víctima puede probar "con una herida" la agresión sexual: "Pilar Llop, Ministra de Justicia (PSOE), en la SER diciendo que la víctima tiene muy fácil probar que hubo violencia, "con una herida ya se puede probar", y que el consentimiento es secundario. Es decir, confirmando que su propuesta vuelve al código penal de La Manada".
También reaccionó la compañera de Consejo de Ministros Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y líder de Podemos, aunque bajando el tono. Lo que hizo es contra-argumentar a Llop con este mensaje en redes sociales: "Si probar la violencia en una agresión sexual es tan sencillo, ¿por qué en el 2021 de 4.000 sentencias sólo 500 mujeres pudieron probarla? Otra vez el foco en las mujeres, en cuánto nos resistimos, en si cerramos las piernas. Es el modelo de La Manada, no el del consentimiento".
Por su parte, la secretaria de Organización de Podemos, Lilith Verstrynge, escribió: "¿Y qué ocurre si no hay herida? ¿Se asume que se ha consentido? Habrá que demostrar que no. Es decir, esta reforma vuelve al modelo anterior".
También escribieron otros dirigentes y políticos del entorno de Podemos, dejando claro que la postura de Llop y el PSOE sería volver al modelo anterior, dejando invalidado el concepto del consentimiento como pilar de la ley, por lo que la mujer o la víctima tendrá que enfrentar un "infierno probatorio" para poder ganar un juicio tras sufrir una agresión sexual.
Los socios parlamentarios del Gobierno ya se han pronunciado. El portavoz de Esquerra Republicana (ERC), Gabriel Rufián, dijo en el Congreso que su partido no iba a "contribuir a volver al infierno probatorio que significaba para las mujeres la anterior legislación''.
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