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Rusia y China firmarán el martes un acuerdo de suministro de petróleo de largo plazo, y Pekín está en conversaciones para prestar de 20.000 millones a 25.000 millones de dólares a compañías rusas en créditos respaldados por exportaciones, dijeron fuentes de la industria el lunes.
El acuerdo dará a China acceso a 300 millones de toneladas de petróleo ruso en los próximos 20 años, lo que representa un 4 por ciento de su demanda anual, mientras que permitirá a las empresas rusas arreglar financiamiento inmediato que necesitan en medio de una estrecha liquidez.
El acuerdo estará en la agenda del primer ministro chino, Wen Jiabao, cuando se reuna con funcionarios rusos el martes.
El Kremlin está buscando diversificar sus rutas de exportación, concentradas en Occidente, y apunta a China como principal mercado para su crudo del este de Siberia.
"Es un acuerdo enorme. El mayor entre firmas petroleras de Rusia y China", dijo una fuente que conoce el asunto.
Fuentes dijeron que si se llega a un acuerdo en el préstamo, la mayor petrolera estatal rusa Rosneft obtendría tres quintos, mientras que el monopolio de ductos Transneft se quedaría con los otros dos quintos. Rosneft no quiso hacer comentarios.
El portavoz de Transneft, Igor Demin, dijo que su empresa y CNPC firmarían el martes un acuerdo para la construcción de un ducto que una tendidos rusos y chinos. El ejecutivo no quiso hacer más comentarios.
El Gobierno de Rusia ha prometido 50.000 millones de dólares de sus 500.000 millones en reservas, las terceras del mundo, para ayudar a las empresas del país a refinanciar 120.000 millones de dólares de préstamos extranjeros que vencen hasta fines del 2009.
China tiene las mayores reservas del mundo, de 1,9 billones de dólares.
"Es una situación ganadora para ambos, una buena conjugación de los intereses de Rusia y China", dijo Ron Smith, analista jefe de Alfa Bank.
"Los chinos tiene una enorme interés estratégico en este ducto, pero sin financiamiento barato se veía dudoso", añadió.
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