Bono controla los gastos de sus señorías

Si Manuel Marín dejo su particular impronta como presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, como se está comprobando, no está dispuesto a ser menos.

El manchego lleva unos días en el ojo del huracán por sus críticas al absentismo de sus señorías y por su controvertida decisión de colocar una placa conmemorativa a Sor Maravillas, a lo que ya se han opuesto los grupos más ‘izquierdosos’ de la Cámara.

Pero hay otra medida que no ha trascendido y ha tomado recientemente Bono, causado cierto revuelo entre los parlamentarios, poco acostumbrados a que se les ‘vigile’. Y es que por acuerdo de la Mesa del Congreso, el antiguo talonario de vales que tenían sus señorías para sacarse los billetes de avión– y que debían  rellenar con sus datos a mano - ha sido recientemente sustituido por una tarjeta VISA exclusivamente destinada a reservar vuelos, vía Internet, en las compañías autorizadas por la Cámara (Iberia, Spanair y AirEuropa). Un sistema, desde luego, mucho más moderno y más acorde con los tiempos que corren.

Bien. Pero, según ha podido saber este diario e-Xclusivo, la gran novedad de todo es que desde hace poco a sus señoría les ha empezado a llegar mensualmente un listado de todos los viajes que realizan y el coste que han generado, para que se ‘conciencien’. Un dinero que no sale de su bolsillo, sino de la Cámara. O mejor dicho, del bolsillo de todos los españoles, claro.

Este sistema se puso en práctica en los hospitales de Valencia  a cuyos enfermos se les pasaba una factura de lo que había costado su estancia en el centro sanitario, aunque no la pagara el paciente. Se le llamó “factura sombra”, según nos cuentan.

De modo que el presidente Bono, copinado la idea, parece que intenta  también que sus señorías se den cuenta del enorme gasto que soporta la Cámara con sus idas y venidas y se controlen en estos tiempos de crisis. ¿Se aplicará él la receta?. Preguntamos.