Los sudores del PSOE para no perder votaciones en el Congreso

Que las cosas no pintan bien para el Gobierno de Zapatero en el Congreso de los Diputados desde que las tornas han cambiado en Galicia y en Euskadi a raíz de las elecciones autonómicas ya lo está comprobando con amargura la dirección del Grupo Socialista.

Si la semana pasada sudaron lo suyo para salvar algunas de las iniciativas presentadas y no perder las votaciones en el  pleno, la sesión de este martes ha sido el puro reflejo de los complicados equilibrios parlamentarios que le esperan al PSOE al menos hasta que se celebren las elecciones en Cataluña – prevista para otoño de 2010- y puedan asegurarse el ansiado apoyo de CiU.

Precisamente, los nacionalistas catalanes fueron los artífices este martes del acuerdo alcanzado entre los dos grupos mayoritarios para que una moción que habían presentado los populares encaminada a conocer la posición del Gobierno sobre el proceso de reestructuración del sistema financiero español, no fuera rechazada por el PSOE. El autor del ‘milagro’ fue el portavoz de Economía de CiU, Josep Sánchez Llibre, que peleó lo suyo hasta lograr convencer a Ramón Aguirre (PP) y a Francisco Fernández Marugán (PSOE) para que se sumaran a un texto alternativo elaborado por ellos. El diputado catalán argumentaba por los pasillos que los ciudadanos no iban a entender que en un tema de tanta transcendencia los dos grandes partidos no se pusieran de acuerdo. “Es un asunto de Estado”, sentenciaba Sánchez Llibre.