Regreso sin coches tras las vacaciones

Según fuentes municipales, las cifras que se han registrado este lunes, en comparación con un lunes del mes de junio (último mes comparable en cuanto a niveles de tráfico) arroja unas cifras de fluidez en la movilidad madrileña. En la M-30 se ha registrado un 17,4 por ciento menos de tráfico, mientras que hace tan sólo una semana era del 25,9 por ciento. En el casco urbano el nivel de tráfico en hora punta con respecto a junio ha sido un 16,7 por ciento menor, frente al 20,8 por ciento de cualquier lunes de agosto.

Tranquilidad, por tanto, en las carreteras madrileñas, a las que no han afectado las obras. Según el Consistorio, esta fluidez se ha conseguido gracias a que los ciudadanos han optado mayoritariamente por el uso del transporte público para acceder al centro urbano. En esta decisión, que se certifica en los datos de fluidez de tráfico, influyen de forma importante los parquímetros. Los coches utilizan Calle 30, principalmente, para dirigirse a los barrios de la periferia, motivo por el que el aumento del flujo en esta circunvalación ha sido mayor.

Por lo demás, la jornada se desarrolló con cierto relajo en la ciudad. El Gobierno municipal estima que el impacto real del tráfico no se notará hasta dentro de unas semanas, con el regreso de los niños al colegio y de los últimos rezagados que vuelvan de vacaciones.