Mientras los dirigentes niegan descaradamente conocer a los integrantes de las barras bravas de los clubes, se producen hechos que demuestran la impunidad con la que se manejan los violentos en todos los ámbitos.
Esta vez la llegada de Messi al país llamó la atención no solo por las cualidades futbolísticas del mejor jugador del mundo, sino porque su custodia personal estaba a cargo de un reconocido barra brava de Nueva Chicago.
Según denunció el diario deportivo Olé, Pugliese “no es un extraño en la AFA, ya que desde hace tiempo tiene vía libre para entrar a cualquier entrenamiento de la selección”, incluso los que están vedados a la prensa.
Pugliese fue investigado por la Justicia argentina por el asesinato del hincha de Tigre, Marcelo Cejas, ocurrido el 25 de junio de 2007 tras un encuentro en cancha de Nueva Chicago, además de involucrarse en otros incidentes con armas de fuego.
Después que a nadie le extrañe que sigan produciéndose incidentes en los estadios, ya que entre los pésimos operativos policiales, y la vista gorda de los dirigentes apañando a los violentos, la situación en vez de mejorar va empeorando día a día.
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