El acuerdo con el PNV y Coalición Canaria le ha proporcionado a
José Luis Rodríguez Zapatero el oxígeno que necesitaba para afrontar el año y medio de legislatura que queda en medio de una crisis económica que se ha llevado por delante la confianza de una gran mayoría de españoles en su clase política. El oxígeno de la estabilidad presupuestaria le ha servido al presidente del Gobierno para realizar una profunda remodelación del gobierno que le de el impulso político que necesita para remontar las encuestas tan negativas para los intereses electorales del partido socialista, que parece no serán los del propio Zapatero en 2012.
Este movimiento de ficha ha pillado por sorpresa a casi todos. Algunos lo comentamos en distintas tertulias desde el viernes cuando nos llegaban algunos rumores de una iniciativa esencial para romper la imagen de derrota y caos que presentaba el presidente y su gobierno. Hay una figura que se consolida por encima de las demás: la de
Alfredo Pérez Rubalcaba. Perdió en las primarias de Madrid pero estaba claro que esas primarias no sólo decantaban al candidato a la comunidad de Madrid por el PSOE sino que había que leerlas en clave de sucesión de Zapatero. El elegido es un político con experiencia, con credibilidad y que sabe explicar bien la acción de gobierno. Le toca recuperar mucho terreno perdido con la atención puesta en la recuperación de la economía y la creación de empleo. Metas difíciles de escalar en estos momentos pero la esperanza socialista para los próximos meses está en el final de la banda terrorista ETA. Por cierto, la afirmación de Rodríguez Zapatero de que los mensajes de la llamada izquierda
abertzale no serán en balde han hecho saltar todas las alarmas en el PP.
En su comparecencia para atacar los presupuestos generales del estado, que es lo que le ha dado seguridad y estabilidad a Zapatero, el líder de la oposición, Mariano Rajoy, ha mostrado su total rechazo a cualquier negociación con los batasunos y el entorno de ETA. La información contrastada es que Zapatero y
Rubalcaba están vacunados después del chasco del 2006 y que lo único que esperan es el comunicado que anuncie el final de la banda terrorista y con los batasunos condenando la violencia.
En el terreno político, la pelota está ahora en el tejado de
Mariano Rajoy. No tiene la iniciativa política que ha asumido ahora Zapatero con la remodelación del gobierno. El líder del PP ha mantenido su posición de exigir elecciones anticipadas porque no se necesita un cambio de músicos sino de director de orquesta y de partitura. Rajoy tendrá que pasar a la acción y no creer a quien le asegure que sólo tiene que esperar a que caiga el gobierno como fruta madura. La pelea se presenta dura porque las encuestas tienen la fiabilidad que cada quiere quiera otorgarles. Al final, lo que valen son los votos y esos hay que ganárselos día a día.
Si (
No(
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