Simonovis califica a la jueza Calderón de sinvergüenza

"Dra. Moreno, yo no estoy solicitando traslado para mi casa, (que es donde debería estar), es para un centro de reclusión, pues, entre otras cosas, me permito aclararle ya que veo que poco sabe Usted de Leyes y demás pertinentes a mi caso, el Sebin no es un centro de reclusión, es una sede policial improvisada y en todo caso la permanencia de persona detenida en estas instalaciones, es de carácter preventivo, pero nunca permanente", indicó en una carta.

Señaló que la jueza del cargo goza de un "poder efímero y circunstancial" pero aseguró que terminará siendo tanto o más responsables de las decisiones que haya tomado, "incluyendo al caudillo de Miraflores y a las babosas focas de la Asamblea Nacional".

Recordó tras su juicio que duró 3 años y 14 días se utilizaron sólo siete días continuos para profundizar en 8.313 páginas de evidencias "que nos hacían inocentes" para ratificar su sentencia.

Finalizó su misiva refiriendo que su libertad de conciencia no será doblegada. "Para la verdad el tiempo y para la justicia de Dios." Como dijo el Dr. Diego Arria: "Nos vemos en La Haya".

Juicio a Simonovis

El 22 de noviembre de 2004, dos años después del 11 de abril, es detenido en el Aeropuerto Internacional de La Chinita en Maracaibo, por efectivos de la División de Servicio de Inteligencia Policial (Disip) siendo procesado junto a los comisarios de la Policía Metropolitana de Lázaro Forero y Henry Vivas, así como otros 13 policías por presumirse su participación en el homicidio de manifestantes oficialistas el 11 de abril de 2002 en el puente Llaguno ocurridos en Caracas.

En vísperas del anuncio del jefe de estado mayor Gral. Lucas Rincón de la renuncia a la presidencia de Hugo Chávez. Este, en enero de 2007 dio una amnistía a varios procesados involucrados en golpe de Estado, en el que no está incluido ni Simonovis ni ninguno de los policías.

El 3 de abril de 2009, luego de un juicio de 3 años, la jueza Maryori Calderón dictó su sentencia a 30 años de prisión. Iván Simonovis es considerado prisionero político por Human Rights Foundation, y otras organizaciones.

Carta Completa de Ivan Simonovis

El mío fue el juicio más largo de la historia contemporánea de Venezuela: 3 años y 14 días. Fueron más de 1500 horas de psico-terror judicial, para que al final termináramos como al inicio: siendo los culpables necesarios para que el Gobierno encubriera su crimen.

Fueron innumerables mis participaciones ante la jurista del horror Marjorie Calderón, a quien increpé continuamente, solicitándole que terminara semejante obra teatral. Pero creo que disfrutaba cada nuevo episodio de nuestra muerte a cuentas gotas. Fue tan largo este montaje, que hubo necesidad de relevo por parte de los juristas del horror y fueron necesarios nuevos miembros para esta Corte de Apelaciones del estado Aragua, fue entonces cuando los "Magistrados": Alejandro Pirillo, Francisco Coggiola y Fabiola Colmenares se unieron en roles secundarios.

Pobres genuflexos, quienes servilmente ratificaron mi condena a 30 años; satisfaciendo así las órdenes de quienes los pusieron en sus puestos. Contradictoriamente a este juicio lleno de retrasos y largos lapsos de espera, los Magistrados de nuestro Tribunal Supremo de Justicia, bajo las instrucciones del militar Eladio Aponte Aponte dio muestras de su milagrosa capacidad de lectura y análisis rápido y, repentinamente, en tan sólo ¡siete días continuos!, profundizaron en 8.313 páginas de evidencias que nos hacían inocentes, danto tiempo también en esa misma semana de estudiar la Sentencia de la Corte de Apelaciones, analizó los alegatos de la defensa contenidos en el Recurso, sumándole la elaboración de su Ponencia y sometiéndola a discusión de sus compañeros de Sala.

¡Caramba! Téngase en cuenta además que el tiempo promedio que se toma normalmente la Sala de Casación Penal del TSJ para admitir o no cualquier recurso de casación planteado, es de 55 DÍAS aproximadamente. Creo que sobran las explicaciones de lo que quiero expresar.

En consecuencia, la única conclusión que puede deducirse es que los nombrados cuatro Magistrados de la Sala de Casación Penal produjeron una decisión sospechosa y arbitraria, carente de la ética pública, en detrimento de los derechos constitucionales de los acusados, demostrativa de una censurable conducta carente de imparcialidad e independencia en el ejercicio de sus funciones, comprometedora de la dignidad del cargo al haber puesto en duda la credibilidad, transparencia y realización de la justicia en particular y del Poder Judicial en general.

Pero la pesadilla perversa no termina, nuestro expediente tiene 6 meses en el Tribunal Primero de Ejecución del Edo. Aragua a cargo de la joven Abogada Lorena Moreno Morillo, quien ha dado muchas excusas y no se ha pronunciado acerca de la ejecución de la sentencia, que nos diría los términos en que debemos cumplir la pena, así como el lugar condiciones y fechas de las correspondientes medidas.

La Dra. Moreno, siguiendo la tradición que utiliza el relentar el tiempo, vuelve a hacer evidente que la justicia no existe para aquellos que no apoyemos las intenciones del ejecutivo Nacional. Como prisionero político no puedo experimentar respeto alguno por la "justicia" aplicada en este régimen, porque la legitimidad de este arbitrario y tiránico gobierno es nula.

El ensañamiento es absoluto y está presente hasta cuando Usted, Dra. Moreno negó la solicitud de mi traslado a la Cárcel de Ramo Verde, bajo el argumento absurdo que cito: "PARA CONSIDERAR EL OTORGAMIENTO DE CAMBIO DE RECLUSION SE DEBE TOMAR EN CUENTA LA GRAVEDAD DEL DELITO POR LA CUAL FUE CONDENADA UNA PERSONA".

Por favor, Dra Moreno, sabemos que es joven e inexperta, pero busque mejores argumento para justificar su indecencia. Me parece lamentable que a su escasa edad ya Usted sea parte de las filas de los juristas del horror, pues aunque ahora estén abrumados por el poder y posean una devoción sin límite a Chávez, terminan siendo simples peones, que actúan bajo una obediencia servil. Vergonzoso. Ojalá su familia y amigos tengan la fuerza para afrontar semejante vergüenza.

Dra. Moreno, yo no estoy solicitando traslado para mi casa, (que es donde debería estar), es para un centro de reclusión, pues, entre otras cosas, me permito aclararle ya que veo que poco sabe Usted de Leyes y demás pertinentes a mi caso, el Sebin NO ES UN CENTRO DE RECLUSION, es una sede policial improvisada y en todo caso la permanencia de persona detenida en estas instalaciones, es de carácter preventivo, pero nunca permanente.

Léase la ley de Régimen Penitenciario, Art 14, Traslado Medico, Art 15, Derecho a Trabajo, Art. 23 La Educación, Art. 26 Deporte, Art 28 y 29 Condiciones de Reclusión, Art 35,36 y 40, Asistencia Médica. ¿Cuántos de estos artículos pueden cumplirse en el SEBIN-HELICOIDE, siendo esta la sede operativa de una policía de Inteligencia? En Venezuela, de 1.896 jueces, sólo 936 son titulares.

50% de los jueces venezolanos no gozan de estabilidad en su cargo y pueden ser fácilmente removidos cuando adopten decisiones que podrían afectar los intereses del régimen. Lo que sucede es que alrededor de los déspotas caudillos, se generan agrias y oscuras atmósferas de aduladores, algunos son así por vocación otros por miedo o instinto de supervivencia,

¿En cuál entra Usted Sra. juez? Sin duda alguna, la naturaleza libre de mis pensamientos representan un peligro para su régimen. Mi caso es un testimonio de un credo basado en justicia y libertad. He dicho y hecho lo que muchos estando presos o aún en libertad no se atreven y le puedo asegurar Sra. Juez, que hasta mi último aliento de vida así será, y miles de hombres y mujeres estarán dispuestos a defender conmigo estos valores que usted ya perdió.

Sra. Lorena Moreno usted y otros "Jueces" gozan de un poder efímero y circunstancial, inexorablemente todos terminarán siendo tanto o más responsables de las decisiones que hayan tomado, incluyendo al caudillo de Miraflores y a las babosas focas de la Asamblea Nacional.

Hagan lo que hagan y por más represión que nos infrinjan, mi libertad de conciencia no será doblegada. Le digo a usted y a sus "Cómplices Necesarios" en la sistemática violaciones de Derechos Humanos: cada día que pasa el mundo se hace más pequeño para tiranos y para sus esbirros y cada día serán menos los aeropuertos donde puedan llegar. "PARA LA VERDAD EL TIEMPO y PARA LA JUSTICIA DIOS." Como dijo el Dr. Diego Arria: "NOS VEMOS EN LA HAYA".