El rincón de Gumer: Y Don Mariano se hizo a la mar

Don Mariano, puro en ristre, embarcó en la gamela “Flora” en el pequeño puerto de Cabo de Cruz (Boiro) el pasado jueves. Era muy de mañana cuando, acompañado de su hijo Marianin, acudió a su anual cita con la faneca, ese pescado blanco del que ya les habló el jefe en “El viejo y el mar”. Escaqueado entre unas redes observé el ceremonial de partida, con algún que otro “pelotari” esperando su minuto de gloria. Esas horas en el medio de la Ría de Arousa, soportando un incómodo nordeste, le han servido para meditar sobre los duros problemas que probablemente heredera de Zapatero. Lo que se ha perdido Pepiño Blanco, al que por aquí le llaman -ignoro por qué- “o noso Pinochiño”. Le han fallado sus espías, porque Rajoy faenaba a escasa distancia de su casa veraniega en la isla de Arousa. Una foto, seguro, le hubiera valido para lanzar mensajes envenenados: el líder de la oposición se toca las fanecas, fuma como un descosido, se olvida de los problemas, se le ha visto en compañía de ricachones de la zona… Esas cosas, ya saben, dan mucho juego en vísperas electorales.    El verano, por lo demás, transcurre tranquilo y soleado. Dicen que hay menos gente que otros años y que el marisco ha moderado los precios. A un amigo del jefe le escuche que había comprado percebes de buen tamaño a veinticinco euros/ kilo y nécoras a veinte. A mi me parece un disparate. ¡Con lo feos que son estos bichos! Del jefe ni les hablo porque apenas le veo el pelo. Gumer. El hurón.