Los sindicatos de los trabajadores sanitarios, divididos ante la huelga

El principal caballo de batalla de los convocantes es la posibilidad que abre la Ley de Acompañamiento de los presupuestos regionales de 2007 de convertir los seis nuevos hospitales que se abrirán el próximo año en empresas públicas, sistema que podría extenderse al resto de hospitales de la Comunidad. Esta situación tendría importantes consecuencias para el personal no sanitario de los hospitales, cuya gestión se haría a cargo de empresas privadas. La Ley de Acompañamiento se votará el próximo jueves día 14 en la Asamblea de Madrid, para cuando hay prevista una manifestación en el centro de la capital entre las calles de Sevilla y Neptuno.

"La convocatoria de huelga tiene tres argumentos", explica Carmen López, portavoz del sector de UGT: "los incumplimientos  de acuerdos sectoriales por parte de Sanidad para solucionar los problemas laborales, la privatización de la gestión de la sanidad madrileña y la nueva zonificación sanitaria, que supone que algunas de las 15 áreas tengan más de medio millón de habitantes".

Sin embargo, la convocatoria de huelga, que se produce tres meses antes de las elecciones sindicales del sector, no tiene el apoyo de la coalición del sindicato médico y de enfermeras, CESM-SATSE, que representa al 92 por ciento de los médicos madrileños, según fuentes sindicales, y tiene el 32 por ciento de representación de la mesa sectorial. El CESM se desmarca de la huelga sanitaria convocada por UGT y CCOO después de alcanzar un acuerdo con la consejería el pasado 30 de noviembre en el que se contemplan mejoras retributivas y en la carrera profesional, entre otras.

En el sistema de atención primaria también existen reticencias sobre la huelga. María José Roldán, miembro de la Coordinadora de Atención Primaria, CEAPM, opina que "existen motivos para la huelga, pero se ha convocado con demasiadas prisas". Para la portavoz de la coordinadora no se ha realizado una labor de información previa y es "sospechoso" que los grandes sindicatos se hayan lanzado a convocar una huelga en este momento, a tres meses de las elecciones sindicales y con el apoyo de PSOE e IU.