Zapatero pide un "debate ejemplar" y garantiza la "igualdad" entre los candidatos

Ha sido una intervención muy breve, porque era la última vez que Rodríguez Zapatero hablaba ante un Comité Federal del PSOE, pero exigida por el guión -según medios socialistas- sencillamente por constituir la apertura oficial de los debates para el 38 Congreso socialista. "Me quedo con una sensación de afecto y confianza", dijo Zapatero a sus correligionarios a puerta cerrada, manifestando toda su "gratitud" porque "habéis sido generosos conmigo al apoyar mi gestión durante estos 11 años y saber perdonar mis errores".

En un tono no exento de emoción -según asistentes a la reunión- Zapatero dijo al Federal que "escucharéis palabra de afecto de mí", que será un compañero de todos, que "tenemos que tener confianza en el partido: los congresos en el PSOE -dijo- salen bien para España y para el partido, y así será el 38º congreso" de Sevilla.

En un tono de cierta -y desconocida- autocrítica, el aún líder socialista dijo al Comité Federal que debe haber autocrítica, sí, pero que también hay mostrar "orgullo y reconocimiento" por los servicios prestados a este país durante el mandato socialista. Y en este punto habló del papel del debate en Europa en esta crisis, y cómo debe ser el debate entre los candidatos: "Debe ser un debate ejemplar" y la dirección del PSOE tiene que garantizar la "igualdad" entre los candidatos.

Precisamente, a estos dos candidatos conocidos, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón, se dirigió Zapatero para garantizarles que la dirección socialista sería equidistante y para pedirles un "debate ejemplar" y juego limpio. Seguidamente hizo una reflexión sobre el 38º Congreso, que dijo que debe estar "al servicio de la sociedad española", porque los socialistas no pueden aislarse ni olvidar que la situación en nuestro país es muy difícil y que, pese a cierta mejora, los síntomas son "muy preocupantes".


Griñán pide limpieza y garantiza la neutralidad

Posteriormente a la intervención de Zapatero -a puerta cerrada, como decimos-, el presidente de la Junta de Andalucía y secretario general de los socialistas andaluces, José Antonio Griñán, compareció en una rueda de prensa para afirmar que "desde la ejecutiva vamos a tener una neutralidad activa: cada delegado es dueño de su voto"; es decir, que la dirección socialista no se decantará ni por Rubalcaba ni por Chacón.

Griñán dijo que "vamos a ser capaces de articular un proyecto sólido, comprometido con la realidad", que hay que recordar que más de 7 millones de personas votaron PSOE, pero que hay muchos progresistas capaces de avalar un "nuevo proyecto socialista". En este sentido, dijo que el 38 Congreso "es una oportunidad de renovar el proyecto socialista con un liderazgo fuerte" y no para continuar en los cargos: "No se trata de hablar de poder, sino de política, no de hablar de nosotros, sino de la gente".

Para Griñán, que habló como anfitrión del Congreso -se celebrará precisamente en Sevilla-, se trata de fortalecer una opción política que hable con la sociedad, que nos saque de la crisis de forma equitativa repartiendo los recursos. Y apostó en ese punto en que las elecciones andaluzas de marzo van a significar el inicio de la "recuperación del voto socialista" en toda España.

Respecto al 38 Congreso en sí mismo, destacó que "de la ejecutiva vamos a tener una neutralidad activa" y que no es fácil predecir los apoyos que tendrá cal, dado que "cada militante, cada delegado es dueño de su voto".


Rubalcaba y Chacón presentaron su candidatura

Griñán explicó que tanto Rubalcaba como Chacón habían presentado sus candidaturas en este Comité Federal, y que ambos habían destacado la necesidad de que los socialistas ganen en Andalucía. En este punto, Griñán dijo lo siguiente: "Pido y exijo lealtad a los candidatos con lo que significa la imagen del partido, y juego limpio", porque "el objetivo es hacer propuestas ilusionantes" y por eso "vamos a hacer un gran, un espléndido Congreso".

A preguntas de los periodistas, Griñán dijo que "estoy convencido de que vamos a hacer un gran Congreso, de que la militancia va a votar al mejor candidato", pero se negó en rotundo a señalar cualquier preferencia personal: "Me obligarían a elegir entre dos personas a las que quiero muchísimo y no voy a hacerlo". Sí dijo, no obstante, que los "debates orgánicos me traen al fresco, yo creo que este partido ha funcionado bien, por lo tanto no es ése el problema".

Dijo que quería oír hablar de economía y "de equipos, con qué gente se va hacer el trayecto", y que después se tomará una decisión tras consultar a la militancia: "Yo no tomaré una opinión de arriba abajo, lo haré de abajo arriba".

Por otro lado, se mostró contrario al documento que un centenar de militantes socialistas andaluces -supuestamente movidos por Manuel Chaves- han firmado pidiendo que se retrase el Congreso hasta después de celebradas las elecciones andaluzas: "Mi posición es contraria" al citado documento porque "no podemos llegar a unas elecciones en Andalucía con una interinidad en el partido", es decir, que hay que hacer el Congreso "cuando está previsto y solucionarlo con un Congreso de integración".


Lea también:
- Resumen Ponencia Marco 38º Congreso (pdf)>>