Aguirre tiene clara su estrategia bipartidista: apuesta por una 'segunda vuelta' entre los más votados de las municipales

"Soy partidaria de que se sepa muy bien qué quieren los ciudadanos", ha indicado en una entrevista en 13TV, donde ha señalado que le parece "legítimo" que si la lista más votada suma un 40 por ciento y los "perdedores" un 60 por ciento, éstos últimos se unan.


"Si los perdedores se pueden unir, tienen toda la legitimidad para hacerlo", ha señalado Aguirre, quien cree que sería "conveniente introducir una segunda vuelta "de modo que las dos fuerzas más votadas, ya se supiera quién las apoya, quién va a pactar y en base a qué programa".


Aguirre también se ha referido a la polémica suscitada con su intención de cambiar de lugar el Ayuntamiento de Madrid si llega a ser alcaldesa. La presidenta del PP madrileño entiende que el mantenimiento del Palacio de Cibeles es muy costoso y que se puede ir a la Plaza de la Villa, donde ha estado tradicionalmente la sede.


Y aunque ha dicho que no va a hacer un referéndum con los ciudadanos para saber qué utilidad dar a estas instalaciones, sí que ha asegurado que va a oír a los madrileños para dar a este edificio un uso "más eficiente" y una mayor "rentabilidad".


En este punto, ha aclarado que esta opción suya no es una crítica ni a Alberto Ruiz-Gallardón, responsable del traslado de sede, ni a su sucesora, Ana Botella. De hecho, ha apuntado que "todos" en tiempos de "pujanza y prosperidad económica" han hecho obras que en un momento como ahora no harían.


Ella misma ha dicho que siendo presidenta de la Comunidad ha construido estaciones de Metro que parecen "aeropuertos". "No es ninguna crítica, pero en este momento no estamos para mantener grandes estructuras que si fuéramos empresas privadas cambiaríamos", entiende la candidata.


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