Diez años más para el “Mamo”

La Corte de Apelaciones condenó a diez años y un día de presidio al general retirado Manuel Contreras Sepúlveda, quien fue jefe de la DINA, la policía secreta de la dictadura de Augusto Pinochet.

El juicio se refiere al secuestro calificado (desaparición) de los militantes del Partido Comunista Darío Francisco Miranda Godoy, José Gerardo Solovera Gallardo y Enrique Jeria Silva, detenidos en Santiago por agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA).

También fue condenado en el mismo, a la pena de cinco años de prisión, el coronel retirado Carlos López Tapia. Las sentencias, dictadas por la IX Sala del tribunal de alzada, ratificaron así el fallo de primera instancia emitido el 31 de enero de este año por el juez Juan Eduardo Fuentes.

Darío Miranda, un empleado de 22 años, y José Solovera, un músico de 27, fueron detenidos el 30 de julio de 1976, mientras que a Enrique Jeria, un obrero de la construcción de 37 años, lo detuvieron los agentes el 18 de agosto siguiente, según consigna el Informe Rettig, que certificó algunas de las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la dictadura de Pinochet (1973-1990).

Los tres, según testimonios de supervivientes, fueron vistos en Villa Grimaldi, un centro clandestino de torturas de la DINA, hasta finales de agosto de 1976, cuando su rastro se perdió de forma definitiva.

Tanto el fallo de primera instancia como el dictado el miércoles por la Corte de Apelaciones desestimaron los argumentos de la defensa, que pidió la prescripción de la acción penal y la aplicación del Decreto Ley de Amnistía impuesto en 1978 por Pinochet.

Ambos tribunales consideraron los delitos de lesa humanidad y, por lo tanto, imprescriptibles e inamistiables. En lo que va del año la Corte de Apelaciones de Santiago ha dictado 18 sentencias en casos de violaciones a los derechos humanos y un total de 38 fallos desde la primera condena en este tipo de juicios, dictaminada en el año 2004.

El general Contreras acumula una quincena de sentencias condenatorias en su contra, que suman más de 200 años de prisión, aunque al menos la mitad aún está pendiente de una revisión de la Corte Suprema.