Cristina Fernández reivindicó la misión que encabezó el ex presidente Kirchner junto a la comisión de garantes por la liberación de Clara Rojas y Consuelo González, secuestradas por las FARC.
Durante un acto en Casa de Gobierno, la Presidenta se refirió al operativo que culminó hoy con la liberación de las dos rehenes de las FARC y felicitó al presidente venezolano Hugo Chávez que coordinó el proceso.
"Hoy pudimos ver esas imágenes de felicidad, un relato de la realidad maravilloso", dijo la presidenta, y remarcó: "Argentinos, valió la pena".
"Valió la pena apostar a la esperanza, apostar a la vida; valió la pena una vez más luchar contra los molinos de viento", remarcó Cristina.
Agregó que "cuando le pedí al presidente Kirchner que fuera a Colombia lo hice con la absoluta convicción con la que siempre he actuado".
En ese marco, criticó a los diarios "Clarín" y "La Nación" que descalificaron la misión de los garantes porque no había arrojado en principio los resultados esperados.
Así, la presidenta mencionó algunos de las frases que utilizaron esos matutinos: "Se trató de una misión imposible"; "Un desencanto, Kirchner no terminó de entender la intransigencia guerrillera"; "Cristina pagó un alto costo político por su relación con Chávez"; "Kirchner se había metido en un berenjenal".
También "Los pingüinos no sobrevivieron en la selva, son una especie solitaria" y "Chávez se hizo la película y Kirchner fue estrella invitada", entre otros.
"Olvidé mencionar a algunos opositores, pero para ellos no hemos hecho nada bien en estos cuatro años y medio", mencionó la Presidenta.
En ese sentido, Cristina sostuvo que "cuando se está en el medio de una situación humanitaria no hay lugar para las especulaciones".
La Presidenta dijo que "estuvimos al tanto de la operación" y felicitó a Chávez "por su perseverancia".
"Ver la imagen de esas dos mujeres hace sin lugar a dudas que haya valido la pena lo que se hizo", afirmó.
Más adelante reiteró: "queremos ir por Ingrid, ofrecer una vez más la mano tendida y solidaria de la Argentina".
"Con mucha fe y esperanza, con el mismo compromiso de los derechos humanos para vivir en un país donde soñar no sea pecado", finalizó.
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