El valioso cofre, cuyo precio de salida se estipuló en 950.000 dólares, se quedó sin comprador durante el tiempo que duró su puesta a la venta en el portal eBay, desde el pasado 18 de mayo hasta el miércoles.
En el sitio de subastas de Internet no quedó reflejada ninguna oferta por adquirir este legado histórico.
Construido en 1822 en Germantown (Filadelfia, EE.UU.), el cofre perteneció a Fernando Simón Bolívar, sobrino del Libertador, quien conservó en su interior cartas de su tío y de amigos de éste, así como apuntes curiosos, medallas antiguas y el testamento de su padre.
El archivo histórico contiene un documento titulado "Tesoro de familia", que asegura la autenticidad de los objetos que guarda la histórica y preciada arqueta.
Entre los documentos y manuscritos valiosos que encierra el cofre figuran un poema de Manuela Sáenz, quien fue amante de Simón Bolívar, dirigido a éste, y varios manuscritos del "Padre de la Patria" (1783-1830).
La puesta a la venta del legado de Simón Bolívar ha estado rodeada de cierta polémica, ya que hay parientes de la familia que aseguran que Bolívar Carreño se llevó el archivo "sin permiso de la caja fuerte familiar", a la muerte de la abuela que encargada de resguardar los documentos.
Un poema de Manuelita Sáenz y varios manuscritos del Libertador Simón Bolívar forman parte de un singular lote que se ofrece en el popular sitio de subastas eBay.
Un cofre de madera de apariencia común fue el detonante de una feroz polémica en Venezuela pues en él están contenidos 193 documentos y piezas de indudable valor histórico que pertenecieron a Simón Bolívar y sus allegados, que esta semana fueron puestos a la venta en Internet.
Un poema de Manuela Sáenz para Simón Bolívar y numerosos manuscritos del Libertador aparecen relacionados en un anuncio virtual que atribuye la oferta a Luis Fernando Bolívar Carreño, un hombre de 47 años de edad que reside en Miami y es tataranieto de Fernando Bolívar Tinoco, sobrino del Libertador por parte de su hermano Juan Vicente.
Una pelea por la herencia
La subasta del 'Tesoro de familia' -como es llamado el lote en el sitio eBay, que lo puso a la venta por un precio inicial de 950 mil dólares- trae detrás una historia de discordias familiares en las últimas generaciones que llevan el apellido Bolívar.
Desde el comienzo, la familia del Libertador tuvo problemas para partir la herencia. Fue difícil que las hermanas de Bolívar, Juana y María Antonia, se pusieran de acuerdo con Josefa Tinoco, la viuda de Juan Vicente. Inés Quintero, miembro de la Academia Venezolana de la Historia, dice que el caso llegó, incluso, a instancias legales.
Con todo, un tercio de la herencia del Libertador le correspondió a Tinoco, quien lo repartió entre sus tres hijos: Felicia, Juan y Fernando Bolívar Tinoco. Este último, uno de los sobrinos más queridos del prócer, trabajó como su edecán hasta 1830, por lo que pudo conservar la correspondencia que hoy es subastada.
En las tres primeras décadas del siglo pasado, Fernando Simón Bolívar, nieto del sobrino del Libertador, se casó con Luisa Matos Boscán, quien se encargó de resguardar los documentos.
Un primer lote de artículos fue vendido en 1988 al Banco Central de Venezuela (BCV). Los Bolívar acudieron en principio a la casa Christie's para hacer una subasta pública, pero la conmoción que causó la posibilidad de que las pertenencias del prócer fueran vendidas obligó al gobierno de Jaime Lusinchi a negociar. El BCV pagó 2,9 millones de dólares por un lote de medallas, vajillas y cubiertos.
No todo se había vendido… La familia conservó otro tesoro: los manuscritos.
Luis Bolívar, el vendedor en eBay, aseguró vía telefónica, desde Miami: "Traté de conservarlos, pero ya no tengo condiciones para mantenerlos porque necesitaría más recursos". Sin embargo, otro pariente que pidió no ser identificado señaló que, al morir la abuela Matos, Luis tomó esos archivos, sin permiso, de la caja fuerte familiar.
"En 1996 redactamos un documento en el que se detallaba que él tenía eso en custodia. Después le perdimos la pista", dijo la fuente, que asegura que a Luis y a sus tres hermanas les corresponde solo 25 por ciento.
En el cofre de Fernando Bolívar había también unos arneses de plata del Libertador que Luis Bolívar vendió al Museo Nacional de Colombia. Margarita Mora, jefe de comunicaciones del museo, confirmó que la compra la hizo el Ministerio de Cultura hace 10 años, a través de la empresa Christie's, a la cual le pagó 340.000 dólares.
Si se comprueba la autenticidad de los archivos, el Estado venezolano estaría obligado a hacer esfuerzos para adquirirlos bajo la Ley de Defensa del Patrimonio. Pero la existencia del cofre tomó por sorpresa al Instituto de Patrimonio Cultural, que se enteró de la subasta cuando El Nacional indagó al respecto. Colombia, a través del Museo Nacional, también está interesada, pero la institución señaló que no dispone de recursos para comprar las piezas.
Entre los sobrinos del Libertador Simón Bolívar hubo uno a quien él profesó especial afecto: Fernando Simón Bolívar Tinoco, hijo de su hermano Juan Vicente Bolívar Palacios y Josefa María Tinoco.
En 1822, Bolívar Tinoco, que contaba entonces con 12 años, fue enviado a Estados Unidos porque el Libertador estaba convencido de que unos cuantos años en la República de George Washington y de Thomas Jefferson serían de gran valor para la formación cultural y política del sobrino.
Tras estudiar en un colegio de Germantown, el joven Bolívar Tinoco continuó sus estudios en la Universidad de Virginia, cautivado por el liberalismo de los cursos y la figura de Jefferson. En 1928 Bolívar Tinoco viajó a Bogotá para desempeñar el cargo de secretario de su tío.
Bolívar Tinoco murió en Caracas en 1898 después de una amplia carrera diplomática.
Volviendo al hecho de que algo con tanto valor histórico y simbólico para Venezuela, muchos nos preguntamos por qué un gobierno derrochador, regalón, no salió de inmediato a adquirir para el acervo histórico de Venezuela este cofre. Mucho “Bolivarianismo” de pacotilla. Quizá si el cofre fuese de Fidel Castro ya la “Chequera loca” habría emitido un jugoso cheque…