Entrevistado por el diario 'El País', el presidente del PDeCAT, David Bonvehí, confiesa que no es partidario de los "ultimátums" y por ello, asegura, su partido "está dispuesto a jugar la carta de Sánchez", aunque "faltan gestos".
"Sánchez tiene que entender que necesitamos movimientos de manera inminente. Hicimos una cosa, que fue hacerlo presidente cuando tuvimos la oportunidad. Y somos nosotros los que ahora estamos pidiendo una propuesta para Cataluña". "Ahora", añade, "Hay que marcar un calendario para el diálogo, definir los interlocutores. No puede ser que cada ministro diga cosas y que además se puedan interpretar distinto. Está el tema de los presos políticos y los exiliados. El Gobierno español puede hacer más de lo que ha hecho. Se equivoca Sánchez si pone el Presupuesto sobre la mesa sin antes mover ficha".
El vicepresidente de la Generalitat y dirigente de ERC, Pere Aragonès, por su parte, rechazó ayer las presiones que sufre el Govern por parte de la Asamblea Nacional de Cataluña, y reivindicó la estrategia de su partido de alcanzar la independencia de Cataluña sin marcarse plazos y ampliando la base social del soberanismo. El aprendizaje que ERC tiene que sacar de estos años, dijo Aragonès, es que "necesitamos ser muchos más, ser mucho más fuertes, para poder asegurar la victoria". El vicepresidente de la Generalitat, según resaltan los medios, coincidía así con las tesis expresadas ayer mismo por el líder de ERC, Oriol Junqueras, que en una entrevista emitida por el programa de TVE "Informe Semanal" rechazaba "la gestualidad" del independentismo y rechazaba la "vía unilateral".
En relación con Cataluña, 'La Razón' resalta hoy que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, tiene pensado recuperar las leyes de desconexión y volver a someterlas a votación en el Parlamento. Así forzaría a Sánchez a actuar contra ellos y obligaría a ERC a "retratarse".
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