Este 23-E será histórico personalmente para los 55 refugiados que han llegado al aeropuerto de Barajas en ese mínimo goteo que se suma al de últimos de diciembre ha permitido al Gobierno alcanzar y superar levemente la cifra redonda de los mil. Lo malo es que de los 17.680 que se comprometió, faltan si las matemáticas no fallan más de 16.500. O sea, el 94%. O sea, casi todos.
Más vale tarde que nunca. Más vale esa pequeña cantidad a ninguna, claro. Más vale esta mínma cifra de los 55 solicitantes de asilo que han aterrizado en Madrid procedentes de Grecia. Según una nota del Ministerio de Interior, de estos 55, la inmensa mayoría, 36 son sirios -como se sabe, el país más afectado por la guerra y la emigración desde hace un lustro- y los 19 restantes son iraquíes.
La anterior llegada de refugiados aconteció el pasado 28 de dicembre -Día de los Santos Inocentes- cuando en el aeropuerto Adolfo Suárez bajaron de un avión un total de 198 personas, también como ahora con una amplia mayoría absoluta de los de nacionalidad siria: 144. Igualmente el segundo grupo más numeroso era el de los iraquíes, a los que se añadieron un iraní y un eritreo.
Sumándolos a los que aterrizaron en meses anteriores del año pasado, el Gobierno español acoge ya exactamente a un total de 1034, una cirfa muiy lejana de los 17.680 que su presidente Mariano Rajoy se comprometió en la reunión 'ad hoc' de Jefes de Ejecutivos, Presidentes y ministros en que la Unión Europea los fue distribuyendo, teóricamente, entre los diversos países. Ninguno de los cuales ha cumplido el cupo, aunque España, con este 6% escaso, figura en el furgón de cola.
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