"He decidido enviar esta misión de alto nivel para que me proporcione información de primera mano, en tiempo real, para alimentar los debates previos al consejo extraordinario del viernes, en el que informaré a los jefes de Estado y de Gobierno sobre la situación", ha explicado Ashton en un comunicado oficial.
La misión, la primera internacional que visita el país desde el inicio de la revuelta, tiene un carácter "técnico", explica el comunicado oficial de la UE. "Pretende evaluar sobre el terreno las medidas humanitarias y de evacuación adoptadas para realizar una valoración de lo necesario en términos de apoyo adicional", señala el texto.
Fuentes diplomáticas de la UE han insistido en que esta misión pretende recopilar hechos, no negociar con las autoridades. "Tenemos gente en las fronteras de Libia, pero a nadie sobre el terreno para saber lo que está ocurriendo", ha afirmado un diplomático en declaraciones a Reuters. "No estamos allí para negociar, sino para escuchar, para saber lo que está pasando", dijo.
La situación empeora
Tanto las fuerzas rebeldes como las tropas progubernamentales mantienen un intercambio de fuego de artillería y mortero en las inmediaciones de la localidad de Bin Jawad, antesala de Sirte, ciudad natal del líder libio, Muamar Gadafi, tras la ofensiva rebelde y contraofensiva que ha hecho cambiar de manos dos veces este domingo el control de la ciudad.
Las milicias rebeldes han tomado este domingo la localidad, pero la contraofensiva de las fuerzas de Gadafi ha obligado a los insurgentes a replegarse y retroceder hasta la ciudad portuaria de Ras Lanuf. Finalmente las tropas insurrectas han emprendido camino de nuevo hacia Bin Jawad, ha informado un corresponsal de Reuters que viaja con la columna, Mohamed Abbas, y ahora la situación parece estancada.
"Estamos a las afueras de Bin Jawad. Se puede escuchar el ruido de las explosiones de los proyectiles que impactan cerca de las posiciones de los rebeldes y se ven las columnas de humo que levantan. También se escucha el ruido de las ametralladoras pesadas en la distancia", ha relatado Abbas.
"Hay una corriente constante de rebeldes regresando hacia el oeste, hacia Bin Jawad", ha asegurado.
El frente se sitúa ahora a unos tres kilómetros de Bin Jawad, donde cientos de combatientes rebeldes armados con ametralladoras y fusiles esperan para poder avanzar.
Uno de los milicianos que regresó de Bin Jawad herido ha relatado desde Ras Lanuf cómo fueron atacados por las tropas leales a Gadafi con ametralladoras y lanzagranadas. Al ser preguntado por lo que pudo ver, éste contestó con un lacónico "muerte".
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