Gobierno promulga nueva ley para proteger refugiados

El Gobierno mexicano promulgó hoy una nueva ley sobre refugiados que aclara por primera vez las circunstancias en que una persona puede solicitar asilo en México, y armoniza las normas del país con los compromisos internacionales suscritos por el estado en la materia.

La Ley sobre Refugiados y Protección Complementaria fue elaborada "tomando en cuenta la legislación modelo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados", indicó durante el acto de promulgación de la norma en Ciudad de México el presidente mexicano, Felipe Calderón.

El Ejecutivo consultó además con organismos internacionales, ONG, académicos, especialistas en materia de refugiados, y las oficinas de defensorías del pueblo nacional y de la capital mexicana para elaborar el texto de la ley que fue aprobado por el Congreso.

"Estamos generando un marco jurídico que da certeza a los procesos que deben seguir quienes buscan asilo en el país y que protege especialmente a los grupos más vulnerables", manifestó Calderón, y aseguró que México "se coloca en la vanguardia mundial en el derecho internacional de los refugiados".

La legislación define las circunstancias para el reconocimiento, cese, cancelación y revocación de las condiciones de refugiado, e incluye lo previsto en la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, adoptada en Ginebra en 1951.

A partir de ahora, una persona podrá solicitar refugio en México cuando sea "perseguido por su raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opinión política", e incluso, género, explicó el mandatario.

Además, una persona que no llegue al país como refugiado podrá ser reconocida como tal si sobrevienen "cambios radicales en su lugar de origen" que pongan en peligro su vida si regresa, señaló.

Asimismo, la ley compromete a México a no devolver a ningún solicitante o refugiado al país en que peligre su vida, su libertad o su seguridad.

El país latinoamericano tampoco sancionará a quien ingrese al país de forma irregular porque es perseguido, y pondrá especial énfasis en proteger a menores y en procurar la unidad familiar de los protegidos.

A partir de ahora los refugiados tendrán derecho al trabajo, así como acceso a la salud y a la educación.

Por su parte, los refugiados deberán "respetar, por supuesto, la Constitución, las leyes, los reglamentos y, en general, cualquier disposición adoptada para mantener el orden público y, desde luego, la vida política del país", puntualizó el gobernante.

Calderón recordó que su país ha sido refugio para los perseguidos durante la Guerra Civil Española, la Segunda Guerra Mundial, las dictaduras en América Latina, los conflictos armados en Centroamérica y, más recientemente, los sobrevivientes del terremoto en Haití.