Sayonara España

A pesar de los esfuerzos de Ricky Rubio, la selección masculina de baloncesto de Estados Unidos arruinó las esperanzas de España de ganar la medalla de oro por segunda vez. El martes, el equipo de Estados Unidos derrotó a España por 95-81 en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Tokio, poniendo fin a la quinta participación olímpica consecutiva de España. España tenía grandes expectativas en esta ocasión y fue uno de los muchos equipos que volaron para jugar un deporte que ha explotado en los últimos años.

Rubio anotó 38 puntos con 13 de 20 en la derrota, pero sus compañeros se combinaron para encestar sólo 16 de 44 desde el suelo. Holiday, uno de los mejores defensores que con frecuencia se encarga de frenar a Rubio, dijo: "No esperaba menos". "Él (Ricky) lleva haciendo esto desde que tenía unos 12 años. Así que, para él, salir aquí y simplemente mostrar su talento es muy maravilloso ser parte y testigo."

Kevin Durant lideró a los estadounidenses con 29 puntos en 31 minutos, pero tuvo mucha ayuda de sus compañeros. Otros cuatro jugadores anotaron en cifras dobles (Jrue Holiday, Zach LaVine, Damian Lillard y Jayson Tatum), mientras que el Team USA lanzó un 48% en tiros de campo en general con 28 asistencias.

"Todo gira en torno a los balones", añadió Durant. "Todo el mundo tiene más energía cuando el balón entra en el aro: entrenadores, jugadores, preparadores, todo el mundo. Empezamos a tirar y a hacer triples, y luego los chicos se enfriaron e hicieron algunas paradas."

"Ellos empezaron el partido con mucha intensidad, y nosotros estuvimos un poco flojos", dijo Durant. "No lanzamos bien el balón, lo que repercutió en nuestra defensa. Pero, al final del segundo cuarto, nos pusimos las pilas y fuimos capaces de hacer algunas paradas, de anotar algunos puntos y de luchar e intentar ganar algo de impulso. Sabíamos exactamente lo que teníamos que hacer en el tercer cuarto".

Fue un choque de titanes del baloncesto, que tuvo lugar en una de las plataformas más prestigiosas del mundo. La selección olímpica masculina de baloncesto de Estados Unidos y España bailaron entre sí, se tantearon

mutuamente y se dieron fuertes golpes durante la primera parte de la semifinal del martes en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Pero fueron los norteamericanos, mejor clasificados, los que dieron el golpe de gracia en el tercer cuarto. Aunque no hubo recuento de ocho, los españoles, segundos, se tambalearon. Con una victoria por 95-81 en el Saitama Super Arena el martes, Estados Unidos avanzó a las semifinales olímpicas al anotar cinco tiros de tres puntos y negar a España un tiro de campo durante casi seis minutos para comenzar la segunda mitad.

En las semifinales del jueves, Estados Unidos, defensor del oro en tres ocasiones y ganador de 15 medallas de oro en 18 viajes a los Juegos Olímpicos antes de Tokio, se enfrentará a Australia o a Argentina. En la competición olímpica, Estados Unidos tiene un balance de 8-0 contra Australia y de 7-1 contra Argentina.

Durante gran parte del segundo cuarto, parecía que Rubio y España -que contaba con dos pentacampeones olímpicos- habían encontrado la receta ganadora para derrotar a los estadounidenses, a los que les ha costado empezar con buen pie en estos Juegos Olímpicos. A falta de 3:25 para el descanso, un 10-0 de España alimentado por siete fallos consecutivos de Estados Unidos puso el marcador en 39-29. Sin embargo, Durant, dos veces medallista de oro y que el domingo superó a Carmelo Anthony para convertirse en el máximo anotador estadounidense de la historia de los Juegos Olímpicos, provocó una oleada de 14-4 para terminar el periodo e igualar el partido a 43-43. En la primera mitad, Estados Unidos hizo 4 de 17 en tiros de 3 puntos.

En el tercer periodo, Durant encestó un par de tiros de tres puntos y los estadounidenses anotaron cinco de sus seis primeros intentos de tres puntos. Durante los primeros 5:44 del periodo, la defensa estadounidense impidió a España anotar un solo tiro de campo. Como resultado de la racha de 22-6, Estados Unidos tomó una ventaja de 65-49. Fue una racha de 36-10 para tomar el control, que se combinó con la racha de cierre de la primera mitad. Tras un raro revés olímpico (3-0) contra Francia para empezar la competición, Estados Unidos ha mejorado poco a poco en sus tres últimos partidos. Para una escuadra que no espera menos que el oro, el equipo podría estar encontrando las piezas perfectas para desarrollar la química en el momento adecuado.