Este viernes entra en vigor el cambio de condiciones que impuso el presidente ruso, Vladímir Putin, de pagar a partir de ahora su gas en rublos.
Distintos países de Europa ya han denunciado que no se pueden cambiar unilateralmente las condiciones de los contratos de suministro, que permiten pagar en euros y dólares.
El mandatario dice ir en serio y ayer jueves recalcó que los países compradores deberán tener cuentas en rublos en compañías financieras locales y que "los pagos del gas que se entregará desde el 1 de abril se harán desde esas cuentas".
Gazprom será una de las empresas que facilite ese trámite: depositar dólares o euros en su cuenta y ellos harán la conversión a rublos. El objetivo es aprovisionarse de divisas extranjeras fuertes.
Pero algunos expertos están hablando claramente de riesgo de caos en el conjunto del mercado del gas por este decreto ruso que entra en vigor.
Putin impuso esta medida del pago en rublos como medida de respuesta a las duras sanciones económicas y financieras contra Rusia tras la invasión de Ucrania, que han puesto en dificultad las cuentas del país.
"Países hostiles"
El autócrata ruso anunció este cambio de criterio el 23 de marzo, exigiendo que le paguen en rublos el gas que vende a "países hostiles", un listado que incluye a la Unión Europea y EEUU.
Su anuncio de cobrar en rublos el gas ruso fortalecía esta divisa frente al euro y al dólar, tras haberse desplomado por la invasión de Ucrania.
"Varios países occidentales han tomado decisiones ilegítimas sobre la congelación de activos rusos, y este Occidente colectivo en realidad ha trazado una línea bajo la confiabilidad de sus monedas", explicó Putin.
A pesar de esta decisión, el presidente ruso confirmaba que continuará suministrando gas de acuerdo con los volúmenes y precios estipulados en los contratos suscritos.
Si (
No(
