Esta madrugada un piloto inglés tuvo que pedir a 20 pasajeros que se bajasen del vuelo Lanzarote-Liverpool voluntariamente porque era imposiuble despegar con ese peso dada la meteorología.
En un anuncio a los pasajeros, el piloto dijo: "Gracias por llegar aquí hoy. Como hay tantos de ustedes, es un avión bastante pesado", indicó como bienvenida.
"Ese avión pesado combinado con una pista bastante corta y con las condiciones desfavorables actuales aquí en Lanzarote, significa que el avión es demasiado pesado para despegar. Me he sentado con mi primer oficial superior y tenemos mucha experiencia con esto y hemos hecho esto antes".
"Con la seguridad como nuestra prioridad número uno, no hay forma, con las condiciones de viento actuales, de que podamos hacer volar este avión. Hay una serie de factores: hace mucho calor, el viento no es fantástico, la dirección no es genial".
¿Qué se podía hacer?
"Ahora, es posible que se pregunte qué sucede a continuación y eso es lo que vine a decir aquí. He hablado con nuestro equipo de operaciones y la única forma de resolver un problema con un avión pesado es hacerlo un poco más ligero".
"Si es posible, me gustaría pedir a 20 voluntarios que decidan no volar a Liverpool esta noche. Si alguien quiere ser voluntario, habrá un incentivo. La compensación actual que EasyJet nos ha indicado es de hasta 500 € por pasajero que está dispuesto a no volar esta noche", anunciaron.
Afortunadamente, hubo 19 pasajeros que aceptaron las condiciones que la compañía inglesa EasyJet les ofrecía si accedían a quedarse en tierra.
El vuelo de Lanzarote a Reino Unido se retrasó por el peso del avión y las malas condiciones climáticas. El vuelo debía despegar a las 21:45, pero no salió hasta las 23:30.
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