Ucrania y Rusia llevaron a cabo el miércoles en Estambul negociaciones con mediación de diplomáticos de la ONU y Turquía para intentar romper el bloqueo de las exportaciones de grano por el mar Negro.
La falta de abastecimiento de estos cereales, sobre todo trigo, ha hecho disparar los precios y crear un riesgo de hambruna en numerosos países, como puede suceder en África, alerta la ONU.
Todas las partes hablan de un "principio de acuerdo", pero Rusia insiste en que la negociación es compleja y que queda por abordar asuntos técnicos para desatascar la situación.
Ucrania pide garantizar la seguridad de las rutas de salida, apoyado por ONU y Turquía, confirmó el ministro de Defensa de este país, Hulusi Akar.
El acuerdo se podría firmar la próxima semana si las negociaciones siguen por la buena senda. Todas las partes están llamadas a una nueva cita en el país euroasiático.
El secretario general de la ONU, António Guterres, vio positivo este "paso importante y sustantivo" para un acuerdo final sobre los cereales. Eso sí, admitió que será necesario más trabajo a nivel "técnico" para que llegue a buen puerto.
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