Vladímir Putin ha ordenado una tregua de 36 horas con motivo de la Pascua ortodoxa. Una noticia que para el presidente ucraniano Volodimir Zelensky es solo una "tapadera".
Según la nota de la Presidencia rusa, la decisión del jefe del Estado es en respuesta al llamamiento del patriarca de la Iglesia ortodoxa rusa, Kiril, de establecer una tregua de Navidad, que los creyentes ortodoxos celebran el 7 de enero.
Pero el líder ucraniano ha criticado la tregua e insiste en que es una "tapadera" cuyo objetivo es frenar el avance de las tropas ucranianas en el Donbás.
Ha resaltado también que con esta pausa el líder ruso pretende acercar equipos y municiones a sus tropas.
"Todos en el mundo saben cómo el Kremlin usa los parones"
La respuesta del presidente de Ucrania ha sido muy crítica y no tiene duda de que es una estrategia de Putin para reforzar a su ejército.
Así lo ha comunicado durante su discurso diario a la nación.
Ha remarcado que esta maniobra "solo traerá más muertos" y que "todos saben" que Rusia "utiliza los parones para continuar la guerra con renovado ímpetu".
Pide coraje a los rusos
Zelensky ha insistido en que este no es el camino para acabar con la guerra y que "lo que se necesita" es que los ciudadanos rusos tengan "coraje".
Ha instado a la población rusa a tener "coraje" para "liberarse de su vergonzoso miedo a un hombre en el Kremlin".
Ha recordado que en el mes de noviembre Ucrania ofreció un acuerdo de paz y que Rusia lo rechazó. Ha señalado también que han fallecido más de 100.000 soldados rusos desde el inicio de la guerra y ha considerado que rechazar las múltiples ofertas de paz para "enviar a toda esa gente suya al matadero" no es de gente que busque la paz y que valore la vida de sus compatriotas.
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