Los miembros de la comisión de evaluación del COI han escuchado este viernes al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, decir que trabaja con "la confianza de que el responsable de Seguridad en 2016 no tendrá que preocuparse por ETA".
La última sesión de ponencias ante los miembros del COI comenzó este viernes con uno de los principales aspectos de cualquier candidatura a los Juegos Olímpicos, la seguridad. Si la sombra de ETA oscureció el proyecto de 2012, en esta ocasión, el responsable de Interior se mostró confiado en que hay razones para pensar que la banda terrorista ya no sea un "problema" en 2016.
Rubalcaba argumentó a los miembros de la comisión de evaluación que en el Mundial de Fútbol celebrado en España en 1982, un año con 216 atentados, no hubo ninguna incidencia. Lo mismo sucedió en Barcelona 92, cuando ya habían pasado los años más duros. Con estos antecedentes, "es evidente que hoy con ETA en horas bajas podríamos garantizar al comité unos Juegos sin problemas", afirmó el ministro en rueda de prensa tras la ponencia.
No se descartan problemas
Al ser preguntado por la posibilidad de que ETA haya desaparecido en esa fecha, Rubalcaba ha repetido la frase -"muy meditada", ha dicho- que ha utilizado ante el COI: "Trabajamos con la determinación y la confianza de que el Ministerio del Interior no tendrá que preocuparse por ETA". "Lo cual no quiere decir que no tengamos problemas", matizó ante la prensa.
El otro argumento utilizado durante la exposición fueron los datos sobre seguridad en Madrid, que en comparación con otras grandes capitales es una de las más seguras, afirmó el ministro, apoyándose en estadísticas oficiales. Las fuerzas de seguridad habituales en la capital se verían reforzadas hasta los 63.000 agentes. Entre ellos habrá unos 10.000 policías municipales y 6.000 militares, mientras que en la actualidad hay alrededor de 30.000 efectivos de las Fuerzas de Seguridad del Estado. Además, se sumarán guardias privados, voluntarios, Protección Civil y Bomberos.
Satisfecho y con ganas
Rubalcaba aseguró sentirse "satisfecho" tras la ponencia porque le había parecido que los evaluadores habían quedado "muy tranquilos", aunque no quiso ponerse nota. Según explicó, no hubo ninguna pregunta sobre ETA, "igual porque ha quedado claro". El COI se interesó por los gastos de seguridad, que serán costeados por el Gobierno central; por si habrá suficientes guardias privados para cubrir el dispositivo; o por si existe un lugar para manifestaciones que no entorpezca el desarrollo de unos Juegos Olímpicos.
Más que una corazonada, el ministro dijo tener "muchísimas ganas" de que Madrid sea elegida en Copenhague. Y eso "como ministro, madrileño de adopción y ex deportista". Además, aseguró que Madrid está muy bien preparada para ser la ciudad elegida y que esta semana de exámenes ante el COI está saliendo bien.
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