Según un informe de la Consejería de Sanidad, dado a conocer este martes por el diario El País, en 2008, cuando los siete nuevos hospitales que se están construyendo en la Comunidad estén a pleno rendimiento, se reducirá la actividad de la actual red pública.
El hospital más afectado por las nuevas infraestructuras sanitarias será el Gregorio Marañón, uno de los grandes hospitales de España, con 1.900 camas, unos 10.000 trabajadores y 420 millones anuales de presupuesto. En su área sanitaria se abrirán dos hospitales -Vallecas y Arganda- que le "robarán" el 59 por ciento de sus más de 700.000 pacientes. Esto reducirá sus ingresos hospitalarios en un 45 por ciento.
El informe prevé que las cifras serán "insuficientes para mantener la viabilidad del Gregorio Marañón en su actual configuración" y el hospital dejará de necesitar 76 locales de consultas externas, 10 quirófanos y 549 camas. Un portavoz de Sanidad ha declinado informar al citado diario sobre cuáles serán los planes de la Consejería para estos recursos.
Otros tres hospitales de referencia que también perderán actividad serán La Paz, cuyos ingresos descenderán en un 18 por ciento, el Hospital de La Princesa, que bajará en un 10 por ciento y el de Getafe, que descenderá un 23 por ciento.