Caen benefactores de los “paras”
lunes 12 de abril de 2010, 13:23h
Varios prestigiosos hacendados, comerciantes y terratenientes, son acusados de patrocinar e incluso determinar numerosos homicidios, desapariciones y masacres, en la región de Urabá y parte de Chocó.
La alianza entre esas dos fuerzas es desde hace décadas un secreto a voces entre los habitantes de los pueblos afectados y las víctimas de los ajusticiados. Sólo en el año de 1997, esta zona tropical del país enfrentó más de 17 masacres, 500 asesinatos y miles de desplazados.
Dentro de los peores actos violentos se recuerda el homicidio del dirigente de la Unión Patriótica John Freddy López Sierra, caso que actualmente se encuentra en manos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en el municipio de Dabeiba en Antioquia.
Dentro de los capturados más importantes están: Juan Guillermo González Moreno, quien es conocido como un importante hacendado y empresario de una firma palmicultora. Es sindicado de concierto para delinquir, secuestro simple y agravado, porte ilegal de armas y tortura.
Carlos Andrés Vargas Montoya, cuyo padre fue asesinado por las FARC y heredó grandes extensiones de tierras, es investigado por concierto para delinquir agravado, porte ilegal de armas, homicidio agravado y tortura.
Jesús Emilio Rueda, que es reconocido como un hacendado de Urabá, tiene cargos por homicidio agravado, tortura, concierto para delinquir y otros.
La Fiscalía General ordenó sus capturas basada en el seguimiento que por años les hizo un grupo especial de la Dirección de la Policía Judicial (DIJÍN), a los dirigentes de la palma y hacendados de Antioquia y Chocó que se sospechaba habían promovido y financiado a los grupos paramilitares de la región entre 1994 y 2006.
La investigación arrojó un listado de 19 implicados, entre autores materiales e intelectuales de crímenes cometidos por el bloque Élmer Cárdenas de las autodefensas. Las capturas llegaban a 10.
Según las investigaciones, Rueda, de 76 años, le habría entregó al "Frente Pavarandó" de las autodefensas un listado con los nombres de 200 campesinos para que fueran ajusticiados por ser supuestos colaboradores de las FARC.
Así mismo, los testigos aseguran que González Moreno hacía reuniones en la finca de alias el 'Alemán', a las que asistía de camuflado. "Las comunidades de la cuenca de Jiguamiandó y Domingodó en el Chocó y el Urabá antioqueño lo identifican como socio de una firma palmicultora y dueño de miles de hectáreas de tierra", señala uno de los investigadores.