Los porteños sabemos muy bien el valor que tiene en el mundo de hoy, una buena educación. Una buena educación es la mejor manera de brindar oportunidades iguales para todos. La educación promueve autonomía, libertad, participación ciudadana y dota a cada uno de capacidad para insertarse exitosamente en un mundo lleno de desafíos.
Una buena educación requiere capacitación docente e infraestructura edilicia adecuada. Requiere inversión en tecnología.
Todo eso no ocurre hoy en la Ciudad de Buenos Aires que tiene subejecutado su presupuesto en educación.
Lo que está ocurriendo hoy con la toma de colegios pone en evidencia, una vez más, el autismo de Macri, su desidia y desinterés por la educación y tantos otros temas que requieren un trabajo sinérgico y conjunto con el gobierno nacional. No hubiéramos llegado tan lejos si el gobierno de la Ciudad hubiese escuchado los reclamos y hubiese utilizado todos los recursos que tiene a su disposición. El presupuesto existe. Lo que no existe es la intención y decisión política -por parte del gobierno de la ciudad- de articular políticas con la Nación.
Buenos Aires debiera ser la ciudad que más invierte en educación. Sin embargo hoy, destina menos presupuesto que provincias como Chaco y La Pampa. La inversión actual de Buenos Aires en educación se redujo considerablemente respecto al año anterior.
El gobierno porteño debe articular y coordinar, en forma urgente, una política educativa con la Nación para jerarquizar y poner nuevamente en escena el valor de la educación pública. Por eso, creo que el próximo Gobierno de la Ciudad debe tener el mismo proyecto que la Nación: un proyecto que prioriza la educación y promueve la igualdad de oportunidades para todos. Un proyecto que invierte y apuesta al futuro, nuestros jóvenes!
Abel Fatala
*Subsecretario de Obras Públicas de la Nación y Candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires 2011.
Buenos Aires, 01 de Septiembre de 2010