Dijo que las declaraciones de Méndez, sobre que Argentina podría convertirse en Cuba, "nos retrotraen a una Argentina autoritaria".
El titular del Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que la comparación que realizó el presidente de la UIA, entre la Argentina y Cuba, no genera ningún beneficio y desmerece a ambos países. "Son expresiones antiguas y fuera de lugar, que muestran oposición por la oposición misma", dijo.
Timerman afirmó, en radio La Red, que la comparación es inadecuada. "Me parece que el presidente de la UIA hace declaraciones que nos retrotraen a una Argentina autoritaria. No lo hace en beneficio de algo positivo, lo hace para desmerecer a Cuba y a la Argentina".
El canciller precisó: "Cualquier persona se da cuenta de que los países tienen sistemas distintos. Me parece un acto de locura, como cuando se hablaba de las hordas comunistas avanzando sobre Buenos Aires, en los años 30. Son expresiones antiguas y fuera de lugar, que muestran oposición por la oposición misma".
Las declaraciones de Méndez surgieron luego de que la Confederación General del Trabajo (CGT) anunciara la presentación de un proyecto de ley para que las empresas participen de sus ganancias a los trabajadores. Por ello, el presidente de la UIA dijo, en declaraciones al diario El Cronista, que esa iniciativa haría que la Argentina se parezca a Cuba.
Además, hace unos días representantes de algunas empresas en la Argentina habían dicho que el país debía tener mayor seguridad jurídica.
"Yo no he tenido quejas de empresas argentinas en otros países. Hablé con la embajadora de los Estados Unidos y no tuve quejas. Con (la secretaria de Estado) Hillary Clinton hablé de política exterior, no sobre empresas. Tampoco me reuní con (el subsecretario norteamericano de Estado para el Hemisferio Occidental) Arturo Valenzuela para hablar de la situación Argentina", dijo.
Timerman precisó: "Lo que hay que debatir es seguridad jurídica para quién. La seguridad jurídica tiene que ser para todos los argentinos y no para un grupo minoritario".
Además, el ministro explicó cual serán los ejes principales a los que apuntará la Argentina en la reunión de presidentes en la sede de las Naciones Unidas, que se realizará el 20 de este mes, y de la que participará la presidenta Cristina Fernández.
"El martes viajo a Estados Unidos para reunirme con el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon. Después me reuniré con los embajadores de América Latina, para profundizar los lazos. Estamos preparando bilaterales para la Presidente y para mí. El tema Malvinas siempre está presente. Yo voy a dedicarle el tiempo al diálogo con países con los cuales habitualmente no lo tenemos", aseguró.
Por último, el ministro habló sobre los dichos de la diputada nacional Elisa Carrió, sobre las torturas durante la última dictadura: "Yo nunca quise entrar en polémica con Carrió, pero cruzó una raya que para ella será difícil volver, que es la de medir el dolor de la tortura de una persona."
"A mí no me torturaron pero sí a mi padre, y nunca se recuperó. Es triste ver a una dirigente política expresarse de esa manera, con tanta liviandad, sobre personas que fueron violadas, torturadas. Ella reconoce la tortura de mi padre pero desmerece la de otros. Me parece que le va a ser difícil pedir disculpas"