El banco central invita a una reestructuración 'ordenada' bancaria
El BCE insiste en que hay que tener un 'Plan B' con más ajustes y reformas
Pide que los países deberían especificar en sus presupuestos nacionales las medidas
Las previsiones de crecimiento suponen una ligera baja con respecto a las del boletín de septiembre
jueves 09 de diciembre de 2010, 12:58h
Así lo pone de manifiesto el supervisor europeo en el Boletín mensual correspondiente al mes de diciembre, donde recomienda a todos los países de la zona euro que establezcan estrategias plurianuales de consolidación "creíbles y ambiciosas" y que apliquen en su totalidad las medidas correctivas planificadas centradas en el gasto. De hecho, el BCE considera que los países deberían especificar de forma detallada en sus Presupuestos para 2011 las medidas de ajuste fiscal necesarias y deberían "estar preparados" para corregir cualquier desviación de los objetivos fiscales anunciados.
Es decir, que tengan un plan B, con más recortes. El Banco Central Europeo (BCE) ve "claramente necesario" que algunos países refuercen la confianza en una finanzas públicas saneadas y permitan así reducir sus primas de riesgo, ya que "sigue siendo muy elevada" la preocupación sobre algunas posiciones fiscales "insostenibles" y la vulnerabilidad de algunos países a las reacciones adversas de los mercados.
El BCE alerta de que algunos países de la zona del euro son muy vulnerables a "las reacciones adversas de los mercados" pero sin citar ninguno en concreto.
"La evolución presupuestaria en algunos países es más favorable de lo esperado", pero "en otros la preocupación en torno a posiciones fiscales insostenibles y su vulnerabilidad frente a reacciones adversas de los mercados es muy elevada y ha tenido repercusión en toda la zona del euro", según el BCE.
Más reformas estructurales
Por otra parte, el BCE indica que deberían aplicarse con "celeridad reformas estructurales sustanciales y de gran alcance" para mejorar las perspectivas de un mayor crecimiento sostenible.
En concreto, subraya que las reformas estructurales de "gran calado" se precisan de "forma especial" en aquellos países que en el pasado han experimentado una pérdida de competitividad o que aún soportan déficits fiscales y exteriores elevados.
Sobre el mercado del trabajo, indica que "la eliminación de las rigideces contribuiría al proceso de ajuste de estas economías".
Mensaje a los bancos
Según el BCE, todas las medidas estructurales deberían verse respaldadas por una reestructuración "apropiada" del sector bancario, ya que el saneamiento de los balances, el control efectivo del riesgo y unos modelos de negocio "transparentes y sólidos" siguen siendo elementos fundamentales para reforzar la resistencia de las entidades a las perturbaciones y asegurar un acceso adecuado a la financiación.
Las estimaciones del organismo señalan que durante el tercer trimestre el PIB europeo creció un 0,4%, y se espera que continúe el crecimiento en el cuarto trimestre. Para el conjunto del año, las previsiones del órgano bancario europeo son un PIB de entre el 1,6% y el 1,8%.
El crecimiento continuará en 2011, según el BCE, que espera un avance de la economía de entre el 0,7% y el 2,1% en 2011 y entre el 0,6% y el 2,8% en 2012.
Las previsiones de 2011 suponen una ligera revisión a la baja respecto al último boletín, del mes de septiembre. Entonces había pronosticado un crecimiento de hasta el 2,3% para el año que viene, dos décimas más.
Inflación moderada
Según el boletín de diciembre del BCE, "la demanda interna del sector privado debería contribuir cada vez más al crecimiento, respaldada por la orientación acomodaticia de la política monetaria y por las medidas adoptadas para restablecer la confianza en el sector financiero".
Respecto a la inflación, las previsiones del órgano bancario europeo son que el año se cierre en las tasas actuales, del 1,9%, "antes de volver a moderarse a lo largo del próximo año".
"Las expectativas de inflación a medio y largo plazo permanecen firmemente ancladas en línea con el objetivo del Consejo de Gobierno del BCE de mantener la inflación en tasas inferiores, aunque próximas, al 2% a medio plazo".
Respaldo a Irlanda
En el editorial, el BCE también apunta que apoya el programa de ajuste económico y financiero acordado por el Gobierno irlandés tras la conclusión con éxito de las negociaciones con la Comisión Europea, en coordinación con el BCE, y con el Fondo Monetario Internacional.
Para el Banco Central Europeo, el programa incorpora los elementos necesarios para lograr una estabilización sostenible de la economía irlandesa y aborda con determinación las causas económicas y financieras subyacentes de la preocupación actual de los mercados.
Por todo ello, considera que contribuirá a restablecer la confianza y salvaguardar la estabilidad financiera en la zona del euro.