¿Se rompe la UFP-CEP?
martes 27 de noviembre de 2007, 07:43h
Tras 22 años como secretario general (5 en el SNP y 17 en la UFP) ha sido relevado Francisco Vázquez Romay. Para algunos, la Unión Federal de Policía (UFP) está rota en dos; y esos mismos dicen que la Confederación Española de Policía (CEP) está a punto de romperse. Bueno, puede que todo sea un poco exagerado, pero estos dos sindicatos policiales tienen problemas internos.
Y a río revuelto ganancia de pescadores. Así, el Sindicato Unificado de Policía (SUP), posiblemente supere el próximo mes de noviembre, por primera vez desde que existe, los 30.000 afiliados por nómina. Eso nos confirman medios internos del SUP, que consideran que, al final, Romay ha sido la primera víctima del nuevo Catálogo policial y del "abrazo del oso" de Pérez Rubalcaba.
En este sentido, Justo Zambrana, subsecretario de Interior, asistió al Congreso de la UFP y se le ocurrió alabar la política de adquisición de vehículos -cuando la UFP presume de ser quien es más crítico con los nuevos vehículos y sus asientos de tortura-.
Ya se dividió la UFP el 8 de marzo casi en dos mitades: una encabezada por Romay y secundado por los dos vocales del Consejo y UGT para pactar con CEP en las elecciones, y otra por los que se oponían al pacto electoral con la CEP y lo defendían con el SUP. En aquella ocasión ganó Romay. Pero en este congreso ha perdido, pese –o quizá por- su discurso de apertura en el que dijo cosas como que "el gobierno que cumple con los policías", ignorando que ha incumplido el cambio de grupos o la equiparación salarial, o que "el SUP es un sindicato al servicio del PP", cosa que nadie se cree.
En cualquier caso, parece que hay atisbos de crisis en la UFP: nos dicen que 3 de sus vocales en el Consejo de la Policía van diciendo que van a permanecer en la organización pero sin acatar las directrices de su dirección nacional. Y, por otro lado, Romay señala que se querellará contra los que han ganado el congreso por las acusaciones falsas que han vertido contra él (relacionadas con la gestión económica). En cualquier caso, la CEP, aliada de la UFP, no sabe si su interlocutor es el nuevo secretario general o los vocales de la UFP en el Consejo. Y mientras ellos se pelean, el nuevo Catálogo -que no gusta a casi ningún policía- ya está en Hacienda.