El magistrado del Tribunal Supremo de España, José Antonio Martín Pallín, afirmó hoy, durante el juicio al ex presidente Alberto Fujimori, que es muy difícil encontrar pruebas directas en los crímenes de Estado.
“Es muy difícil encontrar rastros documentales de una orden expresa”, indicó el magistrado durante su exposición respecto a sus experiencias internacionales, académicas y judiciales sobre la dificultad probatoria de los crímenes de Estado.
Martín Pallín declaró en su calidad de perito extranjero ofrecido por los abogados de la parte civil, en la nonagésima cuarta sesión del juicio seguido contra el ex mandatario.
El letrado español sostuvo que la experiencia histórica indica que en los crímenes de Estado, siempre existe un plan en el que participan quienes están a la cabeza del Estado y los cuerpos de seguridad policía, servicios secretos o miembros de las Fuerzas Armadas.
Asimismo, el magistrado manifestó que debido a la importancia del plan, se adoptan medidas para evitar vestigios o pruebas que pueden ser utilizadas posteriormente en un juicio.
En ese sentido, explicó que el Estado dispone de medios suficientes para dejar en incógnita el crimen que pueden llevar a determinada conclusión en un juicio.
Además aseguró los crímenes de Estado se presentan en diversas formas para obstruir la investigación, siendo una de ellas, la táctica de negar documentos, que estos han sido destruidos o que no pueden revelarse por considerarse documentos clasificados.
Agregó que otra característica de los crímenes de Estado es que si el juicio llega a realizarse, luego se produce “una especie de pacto” para el cumplimiento de una pena simbólica o se dicta una amnistía.
“No es fácil enfrentar este tipo de investigaciones ni obtener prueba directa”, precisó Martín Pallín.