El fiscal del Tribunal Supremo, Álvaro Redondo, ha desmentido que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, le estuviera presionado para exonerar al ex president catalán Carles Puigdemont del delito de terrorismo por el caso 'Tsunami Democràtic', como así le está imputando el juez Manuel García Castellón.
Este lunes se ha conocido el escrito de Redondo en el que destaca que no hay terrorismo ni concurren indicios racionales de criminalidad contra Puigdemont, por lo que pide devolver la causa al juez de la Audiencia Nacional para que siga la instrucción de la misma. Pero,al mismo tiempo, varios medios de comunicación han sacado una información diciendo que Redondo había cambiado su criterio después de reunirse con el fiscal general del Estado, una acusación sobre la que el PP ha solicitado explicaciones urgentes y que ha hecho que tanto él como García Ortiz hayan sacado sendos comunicados rechazando de plano cualquier injerencia.
El origen de la polémica reside en un supuesto primer borrador que citan algunos medios en el que Redondo sí habría llamado a los hechos de Tsunami como terrorismo y que él mismo se habría encargado de corregir después, después dereunirse con el fiscal general. Al respecto, el fiscal Redondo ha defendido su actuación. "Desmiento haber recibido ninguna instrucción del fiscal general en relación con este asunto. Reitero: no recibí, no ya una instrucción, sino siquiera una mínima sugerencia por parte del fiscal general del Estado sobre la postura jurídica que debía asumir, como ponente, ante la Junta de Fiscales del Tribunal Supremo".
Comenta que hizo "un primer borrador interno como documento de trabajo" y que, "varios días después", redactó "el borrador de ponencia para la junta de Fiscales", en el que dejaba claro que "los hechos no constituían concretamente un delito de terrorismo". Después de ello, se reunió el pasado 30 de enero con el fiscal general, a quien informó someramente del sentido de su borrador de ponencia, sin que este le pasara ninguna instrucción ni él le entregara copia del borrador. Ya después anunció su decisión de manera informal a varios compañeros y luego el fiscal de Sala le dijo que había acordado que el asunto se debatiera en la junta del 6 de febrero, por lo que ya sí mandó el borrador a los fiscales de la Junta.
Este lunes, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha demandado a García Ortiz que dé explicaciones en el Congreso sobre el cambio en el informe. En una entrevista en 'Las Mañanas de RNE', Gamarra ha asegurado que el fiscal general del Estado tiene que "informar con absoluta transparencia" sobre si mantuvo una reunión con su subordinado del Supremo para que cambiara de opinión.
El fiscal general también niega presiones
Por su parte, el fiscal general ha desmentido que haya presionado al fiscal del Supremo anunciando en un comunicado que "respeta absolutamente la libertad de criterio del fiscal Álvaro Redondo en esta causa, y la de todos los fiscales en cualquier otra".
Por lo tanto, "niega tajantemente las informaciones que afirman que ha influido en la decisión" de Redondo y asegura "que va a requerir formalmente a los medios que han difundido informaciones sobre las supuestas presiones al fiscal Álvaro Redondo para que rectifiquen inmediatamente la información difundida, sin perjuicio de ejercitar, en su caso, las acciones que resulten oportunas".
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