Este martes, un total de 13 miembros de la dirección y la ejecutiva de Podem Cataluña han dimitido tras ser expedientados por defender en junio la "unidad" con Sumar, momento en el que se debatía sobre si Podemos se sumaría o no al proyecto liderado por Yolanda Díaz.
En un comunicado explican que han tenido conocimiento de la "incoación de un expediente y la suspensión cautelar de militancia" por parte de la ejecutiva del partido de las 13 personas que suscribieron el manifiesto.
Los miembros que han dimitido son: el portavoz de Podem y ex diputado de los comuns en el Parlament, Lucas Ferro; la diputada de los comuns en el Parlament Yolanda López, y los miembros de la ejecutiva y la dirección Marcos Galante, Laura Alzamora, Raquel Vernedas, Sarai Martínez, Loren Rider, Xavier Navarro, Ramón Espejo, Marta Gómez, David Pequeño, Rosa Trenado y Gerard Bargalló.
"Queremos expresar nuestra disconformidad con esta decisión que busca censurar el debate sobre la unidad del espacio del cambio. Entendemos que la apelación a la unidad es coherente con el compromiso político y organizativo que asumió la actual dirección de Podem", han lamentado en el comunicado.
La ejecutiva de Podem Cataluña presentó este viernes la incoación de un expediente y pidió la suspensión cautelar de militancia de estos 13 miembros, pero no se lo comunicó a los mismos. Por eso, han lamentado que se esté dando una política de "hechos consumados", ya que a pesar de no haberles expulsado aún de la formación, porque la Comisión de Garantías del partido debe estudiar el caso, ya les han sacado de los grupos de la organización.
"Señalamiento a los militantes"
En el comunicado, que también han remitido a los demás miembros de la dirección, critican que este expediente de expulsión "es la ruptura del compromiso de la dirección con esta unidad y un señalamiento a los militantes" que han apostado por ella.
También han reivindicado la construcción del espacio político de En Comú Podem (ECP), "fruto de la unidad" y a través del que se han alcanzado candidaturas para las últimas elecciones municipales, para las que Podem y Cataluña en Comú anunciaron que concurrían juntas bajo la marca de ECP.
También han lamentado que se está "instalando una hoja de ruta de ruptura en el espacio", han apostado por trabajar desde la militancia de base para ampliar y fortalecer el proyecto, y han calificado la decisión de expulsarles de nociva para Podem y creen que empequeñece el proyecto y el compromiso de la mayoría de sus militantes.
Queda prohibida la doble militancia
La prohibición de la doble militancia se traduciría en la imposibilidad de militar en Podem y en los comunes, algo que no solo afectaría a buena parte de la dirección de la formación morada en Catalunya sino a otros muchos dirigentes, concejales, diputados.... Entre ellos, también a la actual coordinadora de Catalunya en Comú y presidenta del grupo parlamentario de los comunes, Jéssica Albiach, que milita en Podemos.
Desde los comunes son conscientes de la situación y de que la coordinadora autonómica de Podem Catalunya, Conchi Abellán, ha asumido "el mandato de acabar con esa doble militancia", según sus propias palabras, algo que hasta ahora, desde la coalición catalana aseguran que "no se ha traducido en nada".
El veto a la doble militancia no sólo tendría consecuencias en Catalunya, puesto que la voluntad de Podemos con esta medida es frenar que más dirigentes y militantes de Podemos desembarquen en Sumar y ayuden a Díaz a hacer crecer su proyecto a costa del partido 'morado'.
Sumar tiene previsto permitir la doble militancia para dar entrada a miembros de las confluencias que formaron parte del acuerdo para las elecciones generales. No en vano, Díaz tiene intención de presentarse a las próximas elecciones vascas y a las catalanas, donde lo haría con los comunes, pero una desbandada masiva de miembros de Podemos a Sumar desnudaría al partido de Belarra para los próximos comicios.
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