Investigan la muerte de un científico español que estudiaba una enfermedad mortal

La Universidad de Barcelona ha abierto una investigación para determinar si existe una relación entre la muerte de uno de sus investigadores en 2022 con el almacenamiento de muestras no autorizadas de una enfermedad mortal e infecciosa.

El científico estaba estudiando la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, una patología neurológica mortal. Comenzó a trabajar en el centro en 2018 como investigador principal y contaba con grupo propio en el centro.

Según ha publicado 'El País', a finales de 2020 pidió la baja tras un tiempo encontrándose mal y había comentado a algunos compañeros que tenía síntomas compatibles con Creutzfeldt-Jakob. Pero tras la baja pidió privacidad y no reveló su diagnóstico.

El responsable de dicho laboratorio, Isidre Ferrer, informó un mes después de la baja del bioquímico del hallazgo de una serie de muestras de dicha patología y otras similares que no estaban autorizadas, pues las instalaciones no tenían el nivel de seguridad necesario para albergarlas.

Se encontraban en un lugar reservado para el grupo del mencionado investigador y según denunció Ferrer, no tenían registro de entrada.

El responsable notificó todo a la Universidad de Barcelona y al Instituto de Investigación Biomèdica de Bellvitge (IDIBELL). Se procedió al cierre y descontaminación del laboratorio de inmediato.

¿Contaminado por su investigación?

En 2022 el investigador, de 45 años, murió y dada la sintomatología, podría haber relación entre su fallecimiento y las muestras no autorizadas.

Según ha indicado el IDIBELL, las muestras se enviaron a un laboratorio de máxima seguridad para determinar qué eran y si eran infecciosas, lo que se confirmó en marzo de 2023.

Tras la confirmación de la peligrosidad, el centro ha asegurado que ofreció la realización de pruebas entre los profesionales que trabajaron en ese tiempo así como apoyo psicológico.

'El País' ha informado de que entre los trabajadores hay mucha preocupación ya que no se sabe a qué nivel estuvieron expuestos y temen poder desarrollar consecuencias a largo plazo.

Y es que esta patología se puede tener y no mostrar ningún tipo de síntoma durante años, pero una vez se confirma el diagnóstico, la esperanza de vida suele ser de menos de un año.

La enfermedad de Creutzfeldt-Jakob es un trastorno cerebral degenerativo que puede provocar la muerte en poco tiempo. Los síntomas habituales en sus inicios son falta de coordinación muscular, pérdida de memoria y confusión. Una sintomatología que se aprecia en otras demencias como el alzhéimer.

Además de la UB y el IDIBELL, el consorcio de investigación biomédica CIBER también se ha sumado a la investigación para determinar el origen de las muestras y el papel del bioquímico fallecido.

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