El indultado presidente de Esquerra Republicana, Oriol Junqueras, valoró en la sede del partido la decisión de Junts de abandonar el Govern de Cataluña tras consultar a sus bases.
El líder de la formación independentista lanzó "un mensaje de confianza, serenidad y esperanza, desde la convicción de que somos capaces, como país, de afrontar los muchos retos que tenemos delante".
Así, Junqueras sostuvo la postura del president de la Generalitat, su compañero Pere Aragonès, que desea finalizar la legislatura, hasta las elecciones de 2025, en minoría y sin presencia de otros partidos en el Govern.
Junqueras afirmó que no piden que "nadie les venga a ayudar", pero, "obviamente, siempre agradeceremos la colaboración de todos los agentes económicos y sociales".
A nivel político, sin embargo, marcó “una línea roja muy clara” de cara a los posibles socios de Presupuestos y otras iniciativas parlamentarias del Govern. Por ello, djio, "es evidente que el PSC no está comprometido con el fin de la represión, en la medida en que sigue avalando la represión que todavía hay".
"Muchos de sus dirigentes se iniciaron las manos aplaudiendo nuestro encarcelamiento", recordó Junqueras, y aprovechó para trasladar "toda la solidaridad" a las miles de personas represaliadas.
Ofrecimiento socialista
El PSC se había mostrado voluntario para negociar con Aragonès, con la "mano tendida", dijo su líder, el ex ministro Salvador Illa, y sostener al Govern el resto de la legislatura. Una posición ideal para los socialistas, que así podían ser correspondidos en Madrid con el apoyo de Esquerra en el Congreso.
"Esquerra Republicana dará lo mejor de sí misma al servicio de este país" y que "preservar las instituciones es un deber democrático y patriótico y lo cumpliremos, como hemos cumplido todos los deberes con los que nos hemos encontrado", insistió Junqueras, dejando claro que quieren agotar la legislatura con un complicado panorama de soledad parlamentaria.
La prórroga de los Presupuestos para 2023 será la fórmula que parece que adoptará Aragonès para no tener que ceder ante el resto de partidos.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también se había ofrecido "estabilidad" a Aragonès porque "el PSC siempre ha tendido la mano en aras del interés general de la sociedad catalana", argumentó.
Un ofrecimiento que rápido criticó el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, en declaraciones este sábado a los medios de comunicación, criticó que Pedro Sánchez se aproveche de la descomposición del Gobierno catalán para apuntalar su legislatura.
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