El ex president catalán y prófugo de la justicia Carles Puigdemont ha explicado este lunes en redes sociales que ha cancelado su viaje a Estrasburgo y posterior asistencia al Europarlamento ante el riesgo de ser arrestado en virtud de una euroorden de detención emitida por los tribunales españoles.
Puigdemont detalló esta mañana que "a estas horas, ya debería estar viajando hacia Estrasburgo para asistir al pleno del Parlamento Europeo", pero que la ha tenido que cancelar por no obtener una respuesta sobre su inmunidad parlamentaria en calidad de eurodiputado, ya no reconocida por el Tribunal General de la UE.
"Esperábamos una respuesta asertiva del Parlamento sobre nuestra inmunidad de despalancamiento, ambiguamente cuestionada en la sentencia del TGUE, pero todo lo que hemos recibido es que llegado el caso “tomará todas las medidas disponibles para defender cualquiera de las inmunidades a las que puedan tener derecho en ese momento”. Es decir, mayor ambigüedad. Probablemente porque de la sentencia se hace difícil extraer una decisión clara", ha contado el político independentista.
Puigdemont lamentó que el Parlamento Europeo "no garantiza, pues, llegado el caso no se utilice esta ambigüedad para practicar una detención como la de Alguer que, a diferencia de entonces, podría significar el traslado del proceso de extradición a Francia".
Por eso, asesorado por su equipo de abogados, ha evitado cualquier riesgo en suelo francés: "Salvo que el Parlamento nos comunique de forma clara que la inmunidad de desplazamiento, que nunca nos había sido quitada -tampoco en el suplicatorio-, queda garantizada, el consejero Toni Comín y yo no viajaremos a Estrasburgo contrariamente a lo que era nuestra intención y nuestro deber".
"Sin embargo, seguiremos pidiendo una respuesta clara a esta cuestión, no por la afectación personal que pueda tener sino porque afecta a un derecho fundamental que ningún Parlamento del mundo democrático debería discutir", concluye en su nota.
Sin inmunidad
El miércoles pasado llegaba la tan esperada decisión del Tribunal General de la Unión Europea (TGUE), que terminó siendo negativa para los intereses de los líderes independentistas catalanes huidos de la Justicia española, tanto el ex president Puigdemont como para sus ex consellers Toni Comín y Clara Ponsatí, todos ellos eurodiputados.
El tribunal europeo ha retirado su inmunidad parlamentaria después de que la Eurocámara lo hiciera en 2021 y ellos recurrieran esa decisión.
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