FAMMA cumple 20 años de lucha por los discapacitados

Dos décadas de lucha por los derechos de los discapacitados. Así podría resumirse la historia de la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de Madrid (FAMMA-Cocemfe), a cuyo 'cumpleaños' acudieron este martes decenas de personas en la plaza de Felipe II.

Allí se celebró un emotivo acto, presentado por el presidente-editor de Madridiario, Constantino Mediavilla, que sirvió para rendir un sentido homenaje a quienes se han involucrado en estos años en la lucha por los derechos de un colectivo "históricamente olvidado". "Sé que quienes aquí se encuentran dejan que el viento se lleve pocas cosas y trabajan al acecho de todo lo que puede servir para ayudar y para ayudarnos", resumió Mediavilla.

Aurora Pérez, de la Fundación Vodafone, destacó el papel de las tecnologías de la información a la hora de mejorar la vida de este colectivo. En concreto, la entidad desarrolla programas que "están cambiando la vida a muchas personas, como los mayores, los discapacitados sensoriales o la sanidad". "La tecnología debe servir para incluir, no para excluir", concluyó.

Por su parte, Miguel Paraíso, secretario general de Cermi-Madrid, destacó el papel que FAMMA ha representado durante todos estos años en el movimiento asociativo de los discapacitados en el ámbito de la región. "Representamos ya al 10 por ciento de la población·", advirtió, para señalar que "vamos a seguir teniendo presencia en la sociedad y en las instituciones" porque "necesitamos una política transversal, no solo del ámbito de servicios sociales. También tenemos necesidades en el empleo, la sanidad o la cultura", enumeró.

El presidente de Cocemfe, Mario García, se refirió a la historia de FAMMA como una entidad que ha conseguido dar respuesta a la dispersión que hasta entonces existía en el movimiento asociativo del ámbito de la discapacidad. "Hemos conseguido tener una única voz que luche para garantizar el ejercicio de los derechos de los discapacitados", añadió, y recordó que en estos veinte años las cuatro asociaciones fundadoras ya se han convertido en 44. "Atrás quedan los tiempos en los que se nos consideraba ciudadanos de segunda clase y solo recibíamos políticas de beneficencia", explicó.

Carmen Contreras, directora gerente de la Obra Social de Caja Madrid, destacó el compromiso de su entidad con las personas en situación de dependencia y la utilidad de la colaboración de las administraciones públicas, los agentes sociales, la sociedad y la iniciativa privada para mejorar las condiciones de vida de este colectivo.

Tanto Carmen Pérez Anchuela, directora general de Servicios Sociales de la Comunidad, como Sandra de Lorite, directora de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Madrid, destacaron la "fructífera" colaboración de ambas Administraciones con FAMMA-Cocemfe y destacaron su valor tanto como asesora de los problemas que aquejan al colectivo como colaboradora a la hora de desarrollar las políticas que lo afectan.

Por último, Javier Font, presidente de FAMMA-Cocemfe, agradeció el compromiso de quienes han colaborado con la entidad durante sus veinte años de historia y recordó que, en estos momentos, la Ley de Dependencia "no es el único problema que tenemos en estos momentos". "El empleo, las barreras arquitectónicas y las sociales, las más difíciles de eliminar, siguen siendo objeto de nuestra lucha", advirtió. También recordó a las personas que, "por estar más gravemente afectadas, hoy no pueden estar con nosotros. Tenemos que seguir trabajando para quer su vida sea cada día mejor", concluyó.

También hubo un recuerdo para los inicios de FAMMA —que nació en un pequeño local cercano a Bravo Murillo en febrero de 1988— y para los tres presidentes que precedieron a Javier Font al frente de la entidad: Inocencio Valdivia, Luis Cabrera y José Rodríguez. Todos ellos recibieron una placa en reconocimiento a su labor por los derechos de los discapacitados.

La celebración concluyó con un concierto gratuito, abierto a todos los madrileños, de música clásica, a cargo de la orquesta de cámara Amadeo Vives.