ARCO apuesta por la diversidad
jueves 15 de febrero de 2007, 10:14h
La Feria Internacional de Arte Contemporáneo ofrece un poco de todo, desde las vanguardias históricas hasta las tendencias artísticas más actuales. Esculturas de calaveras llenas de fetos y corazones o vídeos marinos que gotean son algunas de las escenas surrealistas libres de interpretación que podrán ver en ARCO. Eso sí, si quieren hacerse con alguna de ellas tendrán que rascarse el bolsillo. Si ansían un Bacon nada más y nada menos, tendrán que tener en cuenta 8 millones de euros, si lo que prefieren es un octógono de metal de grandes dimensiones tendrán que pagar 2 millones de euros. Pero no se asusten, también las hay por precios más módicos que van de 150 a 400 euros.
La 26 edición de Arco abre sus puertas y son muchos los coleccionistas que recorrerán los pabellones 7 y 9 de Ifema en busca de las piezas más deseadas. Las expectativas son altas y apuestan por un claro crecimiento en cuanto a ventas se refiere.
Como es habitual, los Reyes son los encargados de inaugurar oficialmente la feria, tras una breve visita que tuvo lugar ayer por algunos de los pabellones acompañandos por el presidente Roh Moo-hyun, de Corea, país que este año acude como invitado de honor.
El público ajeno al mercado del arte tendrá que esperar hasta las dos de la tarde del viernes 17 para sumarse a la visita de una feria que cerrará para todos el lunes día 19 a las nueve de la noche.
271 galerías de 29 países ofrecen obra de más 3.000 artistas, entre los que figuran firmas del todo consolidadas y creadores emergentes cuyos representantes luchan por darlos a conocer mejor o porque se coticen más.
"En Arco están desde las vanguardias históricas hasta lo más actual, que puede verse en el 'Black Box', en 'Proyectos' y en el pabellón 9 en su conjunto", recordaba la directora, que entre las novedades mencionaba la representación de Corea por medio de catorce de sus galerías, casi todas de Seúl.
QUÉ SE PUEDE ENCONTRAR EN ARCO
En ARCO se puede encontrar casi de todo. Los galeristas ofrecen piezas con precios que pueden llegar a los 8 millones de euros (9,5 millones de dólares) -para bolsillos potentes que apuesten por Bacon, por ejemplo- pero que, en otros casos, no tienen por qué requerir desembolsos superiores a los 150 euros, como es el caso de algunos grabados de artistas no tan encumbrados.
Un octógono de metal de grandes dimensiones y de unos 2 millones de euros, obra de Richard Serra, un Pollock a 2,5 millones, y obras de valor también asegurado de artistas como Calder, Barceló, Picasso, Lichtenstein o Rothko, son ofertas que vienen de la mano de galerías con solera, inscritas en el Programa General y que puede verse en el pabellón 7.
Ya por debajo del millón de euros se encuentra una antorcha cortada de acero del estadounidense Richard Tuttle, valorada en 750.000 dólares.
Los coleccionistas con presupuestos mucho más reducidos tienen la ocasión de adquirir por 200 euros pinturas de María Ortega expuestas en la galería española T20, o un dibujo-collage de Laura F.Gibellini que la madrileña Vacío 9 ofrece por 350 euros.
Por un poco más, 400 euros, pueden comprarse el aguafuerte "Avió blau" de Rierar i Aragó, y la obra "Glasses", de Adelina Lopes.
Y por sólo 150 euros la galería francesa Sollertis ofrece "Desde el Norte", un dibujo con tinta de color sobre papel de Pauline Fondevila.
Las inquietantes esculturas de Bene Bergado -calaveras rellenas de fetos, de corazones- que trae Espacio Mínimo, o las fotografías que esta misma galería presenta de Manu Arregui -una serie de seis en torno a Rubén Orihuela, primer bailarín que logra federarse como gimnasta rítmico en una especialidad hasta hoy feudo de las chicas-; o las poéticas fotografías realizadas por Gilbert Garcin (galería Trinta) en espacios abiertos donde la luz y la sombra trazan sugerentes espacios geométricos, son, en cambio, novedades que pueden encontrarse en el pabellón 9.
Un vídeo marino que gotea y necesita dos barreños debajo para no estropear las alfombras de Ifema, obra de Juan Galdeano (Trinta), los minúsculos y delicados trabajos en finísima malla metálica de Günter Haese; una serie de bolas de cristal con nieve dentro y escenas surrealistas creadas por la pareja de artistas Walter Martin y Paloma Muñoz (PPOW de Nueva York) o la interesante serie del barcelonés Ignasi Aballí (Micheline Szwajcer, de Amberes) sobre los colores y las frases hechas relacionadas con ellos, son también ofertas de los artistas más actuales en esta edición de Arco.