En La Moncloa nadie oculta que el llamado a sustituir al dirigente canario López Aguilar al frente de Justicia tenía nombre propio y apellidos, Antonio Camacho. Sin embargo, al final, el presidente del Gobierno optó por mantenerlo en su cargo en Interior en un momento delicado para el proceso de paz.
Ahora bien, lejos de mantenerse al margen en la decisión del nombramiento del nuevo titular de Justicia, Camacho propuso hace unas semanas a Alfredo Pérez Rubalcaba y, por ende, a José Luis Rodríguez Zapatero el nombre de Mariano Fernández Bermejo, al que considera desde hace años como su ‘hermano mayor’. Su profesión de fiscales les unió hace ya varias décadas.
Mientras, en los cenáculos madrileños no se ocultan la euforia de Rubalcaba, quien, como de costumbre, se ha apropiado de la idea del nuevo fichaje.