Más de 570 científicos argentinos que residían en el exterior regresaron al país en los últimos seis años, informó el Gobierno, que no descarta que en 2009 la cifra dé un nuevo salto a raíz de la crisis global.
"Logramos equilibrar las cifras. Están regresando al país con inserción laboral garantizada tantos científicos como los que se van", indicó el ministro argentino de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao.
En total, fueron repatriados 574 investigadores entre 2002 y lo que va de 2008 como resultado de la Política de Repatriación de Jóvenes Investigadores, según precisó el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet).
El regreso de profesionales se produjo tras la "fuga de cerebros" que afrontó el país ante la profunda crisis social y económica que estalló a finales de 2001 y por la que el desempleo llegó a afectar al 21,5 por ciento de la población económicamente activa.
Durante un encuentro con periodistas, las autoridades del Conicet no descartaron además que la recesión internacional actual estimule a otros científicos argentinos a regresar ante la disminución de oportunidades en el exterior.
"Ojalá que más científicos quieran volver", sostuvo la titular del Conicet, Marta Rovira, al ser consultada sobre la posibilidad de que la crisis global juegue a favor de la repatriación de investigadores.
Las autoridades del organismo estatal también anticiparon que buscan modificar la legislación que exige que los científicos tengan nacionalidad argentina para poder ejercer en el Conicet, de modo que profesionales de otros países también puedan desempeñarse en el país suramericano.
El Conicet cuenta en la actualidad con más de 6.000 investigadores, señalaron las fuentes.
En las cifras suministradas no se discriminó entre los científicos que volvieron a Argentina por su cuenta y los que lo hicieron por iniciativa del Gobierno.