El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, anunció hoy que va a convocar de manera urgente a los agentes sociales, "probablemente después de Semana Santa", para abordar un plan de medidas excepcionales destinadas a atender a todas aquellas personas a las que se les va acabar la prestación del subsidio por desempleo, y que, según el Gobierno regional, serían unas 10.000.
En declaraciones previas a las sesiones de trabajo sobre energías renovables con el ministro de Minas y Energía de Brasil, Edison Lobao, Barreda detalló que esta medida se enmarca dentro del Plan de Reactivación de la Economía regional y apuntó que va a suponer "una importante inversión" del Ejecutivo.
Destacó Barreda que este proyecto requiere la colaboración de los agentes sociales porque "todas las medidas que se han ido tomando hasta el momento han estado precedidas por acuerdos con empresarios, sus organizaciones y sindicatos, y en este caso también".
"Mi principal preocupación son las personas que se pueden ver en esta situación, sin trabajo desde hace meses y a los que se les han acabado las prestaciones. Estas personas van a ser las primeras en incluirse en un plan de empleo consecuencia de estas medidas excepcionales que mi gobierno propondrá a empresarios y sindicatos", apostilló, al tiempo que se mostró dispuesto a escuchar y tener en cuenta las medidas que planteen los agentes sociales para mejorar el plan.
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