A primeras horas de la mañana, Rodríguez Zapatero llamó directamente a Mariano Rajoy para comunicarle el cese de Alberto Sáiz al frente del CNI y el nombre del sustituto, el ex JEMAD Félix Sanz, según ha confirmado el propio Rajoy. Pero ‘comunicarle’, claro, no significa ‘consensuar’ el nombramiento. Justamente de eso se ha quejado Rajoy, que ha confirmado que el Gobierno no ha querido consensuar ni pactar con el PP un cargo tan importante, algo que a él le "hubiera gustado". Tras la ‘comunicación’ de Zapatero, el PP se apresuró a pasar un mensaje convocando a los medios de comunicación a ‘declaraciones’ de Rajoy antes del almuerzo que este jueves mantuvo con los miembros del Comité Ejecutivo de la CEOE.
Tras hacerse pública su dimisión, Alberto Saiz justificó la decisión porque de continuar podría acabar perjudicando la imagen del Gobierno de España, al "que ha servido lealmente".
Asimismo, en un comunicado indica que su dimisión ayudará a evitar un posible deterioro del funcionamiento del Centro Nacional de Inteligencia, "una cuestión que por responsabilidad con la Institución y sus trabajadores y por su compromiso con la seguridad de los españoles no puede permitirse".
Igualmente, reitera la "falsedad de las acusaciones de las que ha sido objeto en los últimos meses", subrayando que ha actuado con total transparencia. Tras contar sus dos comparecencias en el Congreso de los Diputados, afirma que ha dejado depositadas pruebas que demuestran la falsedad de las imputaciones vertidas sobre su persona.
El texto íntegro del comunicado de Alberto Saiz, es el siguiente:
"El Secretario de Estado Director del Centro Nacional de Inteligencia, Alberto Saiz, tras un proceso de reflexión serena y profunda, ha presentado su dimisión al presidente del Gobierno, a quien al mismo tiempo le ha agradecido la confianza y el apoyo que le ha mostrado a lo largo de estos años.
Al margen del desgaste personal sufrido debido a la campaña mediática dirigida contra su honor y su prestigio personal y profesional, Saiz considera que su dimisión ayudará a evitar un posible deterioro del funcionamiento del CNI, una cuestión que por responsabilidad con la Institución y sus trabajadores y por su compromiso con la seguridad de los españoles no puede permitirse.
Asimismo, el Secretario del Estado Director del CNI considera que en las actuales circunstancias, su permanencia en el cargo podría acabar también perjudicando la imagen del Gobierno de España, al que ha servido lealmente.
En esta hora, el secretario de Estado Director del CNI quiere reiterar la falsedad de las acusaciones de las que ha sido objeto en los últimos meses y recordar que ha actuado con total transparencia, acudiendo a dar todo tipo de explicaciones tanto en la Comisión de Defensa como en la de Control de los Créditos destinados a Gastos Rerservados del Congreso de los Diputados, y dejando depositadas pruebas documentales que demuestran la falsedad de las imputaciones vertidas sobre su persona.
Por último, el Secretario de Estado Director quiere mostrar su satisfacción personal por el buen funcionamiento y los buenos resultados que ha obtenido el servicio de inteligencia español en estos últimos años, algo que ha sido posible gracias fundamentalmente a la entrega y al esfuerzo de los hombres y mujeres que integran el CNI.
A juicio de Saiz, preservar el funcionamiento del CNI y que éste obtenga buenos resultados en el desempeño de las tareas que tiene encomendadas es lo único importante, ya que de ello depende en gran parte la seguridad, la libertad y el bienestar de los españoles".
Apoyo en el Grupo Socialista
El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, José Antonio Alonso, por su parte, aseguró que “Sáiz ha comparecido en dos ocasiones sobre las acusaciones que se le imputaban, de las que dijo que no hay ni la más mínima sombra de ilegalidad y que jamás utilizó dinero público para fines privados”.
Ahora bien, la actitud de Saiz de dimitir contrasta, según Alonso, con lo que hace el PP sobre sus casos de corrupción y espionaje, “de lo que aún no ha dado ninguna explicación. Nos da una muestra de su muy mermada calidad de proyecto político y la fortaleza del PSOE”.
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