www.diariocritico.com
Muertos que nadie reclama

Muertos que nadie reclama

viernes 04 de diciembre de 2009, 20:20h
La explosión de un camión de propileno causó 215 muertos en el camping de Els Alfacs, en 1978. Media docena de esos cuerpos jamás han sido reclamados por nadie.

El número de muertos anónimos crece cada vez más en esta sociedad desestructurada. En nuestro país hay unos 3.000 cadáveres sin identificar. Otros sí lo han sido, pero tras seis meses o dos años sin que nadie se interese por ellos acaban en un cementerio sin lápida o permanecen en el frigorífico de algún tanatorio como caso criminal pendiente, si el asunto así lo requiere.
Nada más.

Tampoco suele darse una correlación entre aquellas personas desaparecidas y que son buscadas con ansia por sus familiares —en España se denuncian cada año 15.000 desapariciones sólo de menores— y estos otros muertos, anónimos o no, que nadie quiere. Y es que lo mismo que existen unos modos de vida alternativos, al margen de las reglas sociales establecidas —economía sumergida, indigencia, gente sin papeles, dinero que se queda olvidado en los depósitos bancarios,…— también hay muertos marginales, expulsados del sistema, por así decirlo, gentes que importan tan poco vivas como muertas.
Hablamos de casos cada vez más frecuentes. Tampoco se trata de cifras baladíes. Porque ¿qué familiar en Rumania o Senegal quiere hacerse cargo de un inmigrante indigente por documentado que esté? ¿O cómo identificar, en otros casos, cadáveres sin otra pertenencia que su propia miseria?
Aunque pretendamos ignorarlas, muchas de estas historias, las de los muertos que nadie reclama, son también siniestros y fúnebres ejemplos de la crisis económica actual en su versión más trágica y truculenta.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios