Según un comunicado remitido a diariocrítico por la Jefatura Superior de Policía, la intervención comenzó a raíz de una denuncia formulada por Jacobo J. B., de 29 años, que sufría amenazas de muerte con utilización de armas de fuego que estaba recibiendo desde hacía un año por parte de un grupo que le reclamaban 60.000 euros por un kilo de cocaína que le encargaron transportar desde Madrid a Sevilla en coche, siendo detenido por la Guardia Civil en el trayecto de vuelta, aprehendiéndole la sustancia estupefaciente e ingresado posteriormente en prisión.
Las investigaciones emprendidas llevaron a los funcionarios a la detención de José Antonio F. T., alias “Morti”, de 25 años de edad, con ocho detenciones anteriores, Juan N. M., de 56 años, con cuatro detenciones, Cristian N. G., de 24 años, con dos detenciones, Rubén N. G., de 22, con dos detenciones, y David N. G., de 21, con cuatro detenciones, estos tres últimos hijos del anterior.
En el domicilio del primero de los detenidos la Policía intervino sólo tres teléfonos móviles, pero en el de la familia N. G. se hallaron una pistola de la marca VALTRO, con silenciador y su cargador conteniendo nueve cartuchos calibre 9 mm., una caja de munición de la marca Fiocchi conteniendo 38 cartuchos del calibra 9 mm., una pistola simulada y un spray de gas paralizante, una navaja de grandes dimensiones, un machete de sierra con su funda, un cuchillo de carnicero y un rompe cristales, una palanqueta, un detector de billetes falsos, una báscula digital con capacidad de pesado de tres kilogramos, tres teléfonos móviles,975 euros en efectivo y una cartera con documentación relativa a otras dos personas.
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