Los agentes de la Guardia Civil y un fiscal de Valencia se desplazaron esta mañana al consistorio, donde están buscando diversa documentación relacionada con un presunto delito de prevaricación urbanística.
Al parecer, el caso que se investiga estaría relacionado con la etapa de gestión del anterior equipo de gobierno, formado por el PP y Unión Valenciana.
La operación, cuya investigación se inició ya hace varios meses, se centra en el Ayuntamiento, presidido por el alcalde socialista Antonio Polo, que llegó al cargo en 2006 para sustituir al popular Javier Carrión.
Los agentes investigan la presunta edificación de más de 80 chalés en suelo rústico no urbanizable dirigidos a compradores ingleses y alemanes. Por el momento no existe constancia de que se haya producido alguna detención relacionada con el caso.
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